Foto: Umit Bektas / Reuters
Un día antes del cierre de campaña por el referéndum constitucional que se celebrará este domingo en Turquía y con el que se busca establecer un sistema netamente presidencialista –asunto que ha generado división–, la lucha de ese país contra los “enemigos extranjeros” volvió a ser protagonista en el último discurso del presidente, Recep Tayyip Erdogan.
“Vivimos en una época en la que Turquía se ve sometida a ataques. Las organizaciones terroristas que nos intentan destrozar creen que esta nación va a tener miedo, se va a asustar, se va a rendir”, dijo Erdogan ante una multitudinaria congregación de ciudadanos en Estambul.
“Alemania hace eso, Francia lo hace, Bélgica lo hace, Suecia lo hace, Austria lo hace, pero hagan lo que hagan, no son más fuertes que nosotros. Este domingo vamos a responder a Occidente. Los votos del ‘sí’ serán una respuesta hacia ellos”, dijo.
Pero el interés de los ciudadanos varía según el barrio: si en las zonas conservadoras los puestos del ‘sí’ tienen mucho público, en los distritos con una población de orientación liberal están prácticamente abandonados y nadie se acerca.
A juicio de la oposición, el campo del juego no está para nada equilibrado, entre otros, porque todos los canales transmiten en directo los discursos del presidente a favor del ‘sí’, pese a que bajo la Constitución vigente, su cargo le obliga a la neutralidad.
Las últimas encuestas mantienen una enorme incertidumbre respecto al posible resultado, aunque la mayoría se inclina por un triunfo del ‘sí’, con un 51-52 por ciento, pero advierten que el margen de error es superior a la ventaja obtenida. Otros sondeos dan una victoria ajustada al ‘no’, pero señalan que debido a la presión gubernamental es difícil que los votantes confiesen su verdadera intención a los encuestadores.
EFE
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