Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, anunció que se postulará para una segunda reelección para asegurar otro mandato de seis años en la votación prevista para el 28 de julio, dijo el sábado el gobernante Partido Socialista.
El presidente, un exlíder sindical de 61 años, fue proclamado candidato del Partido Socialista por el vicepresidente Diosdado Cabello y subió al escenario de un gran estadio deportivo para dirigirse a sus seguidores.
«Solo hay un resultado, la victoria del pueblo el 28 de julio», dijo Maduro, vestido con una chaqueta roja brillante con cremallera. «No han podido detenernos ni podrán hacerlo».
Recientemente, unas encuestas muestran que el 13,9% de los venezolanos planea votar por Maduro, muy por detrás del 54,5% de la candidata opositora María Corina Machado.
Sin embargo, Machado ganó una primaria de la oposición en octubre, no estaba claro si aparecerá en la boleta después de que el máximo tribunal del país confirmó una prohibición que le impedía ocupar cargos públicos.
Los candidatos tienen hasta el 25 de marzo para registrarse y no está claro si la oposición nombrará un reemplazo para Machado, quien está bajo una presión cada vez mayor para elegir un sustituto.
Estados Unidos revocó parcialmente las sanciones al gobierno de Venezuela a finales de 2023 debido a un acuerdo electoral con la oposición, pero el incipiente acercamiento llegó a su fin con los arrestos de figuras de la oposición y la decisión judicial sobre Machado. Estados Unidos ha prometido restablecer las sanciones petroleras a partir de mediados de abril.
Algunas fuentes del partido gobernante han dicho que el cambio de política de Maduro puede deberse a la disminución de la popularidad entre su base.
Ahora bien, Venezuela ha sufrido una hiperinflación y un colapso económico sin precedentes desde que Maduro asumió el poder en 2013, tras la muerte de su mentor, el presidente Hugo Chávez.
Cabe mencionar que el país ha sido testigo de oleadas intermitentes de protestas contra el partido gobernante y Maduro, particularmente entre 2014 y 2017, que resultaron en decenas de arrestos y asesinatos.
Los partidos de oposición boicotearon las elecciones presidenciales de 2018 y se negaron, junto con Estados Unidos y otros, a reconocer la victoria de Maduro.
Nicolás Maduro logró una victoria del 1,5% en las elecciones de 2013, que el entonces candidato de la oposición también declaró fraudulentas.
