La IX Cumbre de las Américas arrancó este lunes en la ciudad de Los Ángeles (Estados Unidos) con la apertura del Foro de la Sociedad Civil y en medio de la polémica por la exclusión, ya confirmada por el Gobierno de Biden, de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
“Es un honor darles la bienvenida al Foro de la Sociedad Civil que se desarrolla en el marco de la IX Cumbre de las Américas”, dijo el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, en el acto de inauguración del foro.
Almagro afirmó que la cumbre se produce en un “momento histórico” que debe servir para “fortalecer las relaciones interamericanas” y que refleja el deseo de “renovar la alianza hemisférica” entre los países de la región.
Subrayó que es el momento de “defender con firmeza y determinación” la democracia y encontrar soluciones para los problemas estructurales que afectan al continente.
En la primera de las dos jornadas de este IX Foro de la Sociedad Civil se abordarán, entre otros temas, la protección del medioambiente, la defensa de la democracia, la construcción de ciudades sostenibles y el fortalecimiento de la región para hacer frente a emergencias globales.
Los días previos han estado marcados por la controversia en torno a la lista de invitados, después de que Estados Unidos anunciara su intención de excluir a Cuba, Nicaragua y Venezuela al no considerar democráticos sus gobiernos.
Tras algunos días de incertidumbre, la Administración de Joe Biden optó por dejar a los tres países fuera de la cumbre por “la falta de espacios democráticos y la situación de los derechos humanos”.
Varios países latinoamericanos ya habían expresado su disconformidad con esa decisión y algunos mandatarios, como protesta, decidieron no acudir a la cumbre, como el boliviano Luis Arce y el mexicano Andrés Manuel López Obrador.
La IX Cumbre de las Américas se celebra en la ciudad de los Ángeles hasta el próximo viernes, aunque las sesiones plenarias con los líderes regionales se desarrollarán sólo a partir del jueves, según la programación del Departamento de Estado de EE. UU.
El presidente Iván Duque, por su parte, confirmo que asistirá al evento y aseguró que Colombia llegará al evento con una política migratoria exitosa.
A su vez los mandatarios de Brasil, Lula da Silva y de Uruguay, Luis Lacalle Pou, suspendieron su participación tras dar positivos por la covid-19.
Paralelo al inicio de la Cumbre, que tiene el tema de migración como prioridad, una caravana de cerca de 15 mil migrantes, la más numerosa hasta ahora, partió de Chiapas, sur de México, rumbo a EE. UU.