El Gobierno de Venezuela felicitó al Ejecutivo de Colombia y al Ejército de Liberación Nacional (ELN) por haber desarrollado, «exitosamente», el segundo ciclo de diálogo de paz, que concluyó en México, con el reconocimiento por parte de la Administración de Gustavo Petro del estatus político al grupo guerrillero como «organización armada rebelde».
A través de un comunicado, el Gobierno del país caribeño reconoció el «trabajo constructivo realizado por las partes en este ciclo que culmina, expresado en los avances alcanzados, demostrando un alto compromiso y capacidad de negociación, materializados en los acuerdos logrados que permiten la solidificación de un diálogo franco, en aras de la tan anhelada paz del hermano pueblo de Colombia».
El Ejecutivo de Nicolás Maduro reiteró su compromiso «inquebrantable» de «continuar aportando (…) en el fortalecimiento de este proceso de diálogo, y contribuir con la política de paz total que lidera el presidente» colombiano, Gustavo Petro.
Asimismo, agradeció al Gobierno de México por la «atención y hospitalidad puesta de manifiesto en la realización de este segundo ciclo de diálogos de paz», al tiempo que expresó su deseo de que, en el ciclo venidero, que se desarrollará en Cuba, «se profundicen aún más los niveles de entendimiento y cooperación entre las partes».
Las delegaciones del Gobierno colombiano y del ELN concluyeron este viernes, con la presencia de la vicepresidenta del país andino, Francia Márquez, la segunda fase de la Mesa de Diálogos de Paz, que comenzó en febrero.
Los acuerdos sellados en México también incluyen mecanismos para la «participación de la sociedad en la construcción de la paz», así como el «examen desde una perspectiva democrática, el modelo económico, el régimen político y las doctrinas que impiden la unidad y la reconciliación nacional».
Otro de los puntos pactados se refiere «al reconocimiento a todas las víctimas» y «la asunción de responsabilidades que emane de la verdad de todas y todos».
Las negociaciones entre el Gobierno y la organización guerrillera, que estuvieron interrumpidas durante cuatro años tras iniciar en 2017, se reanudaron en Caracas en 2022 con el auspicio de Cuba, Noruega y Venezuela como países garantes.
México, junto con Venezuela, Chile, Noruega y Brasil, son garantes de los diálogos de paz, mientras que Suecia, Alemania, Suiza y España actúan como países acompañantes.