Mathieu Van der Poel se adjudicó la victoria en la segunda etapa del Tour de Francia. El holandés mostró agresividad a falta de 16 kilómetros en el primer ascenso por el Mur de Bretagne, y nunca miró hacia atrás.
A pesar de un final tenso, con Nairo Quintana corriendo junto a él con solo un kilómetro de distancia, Van der Poel se mantuvo para asegurar el primer lugar.
Los segundos de bonificación que consiguió en la primera ascensión del Mur de Bretagne resultaron decisivos para darle el liderato del Tour de Francia.