Una de las dos jóvenes pasajeras fallecidas en el accidente del vuelo 214 de Asiana Airlines ocurrido este sábado en San Francisco (California) pudo ser atropellada por un vehículo de emergencias, confirmaron hoy las autoridades locales.
Las dos víctimas mortales del accidente sufrido por el Boeing 777 de Asiana Airlines, que registró 181 heridos, ocho en estado crítico, dos de ellos con parálisis por lesiones vertebrales, son dos estudiantes chinas de 16 años, identificadas como Ye Meng Yuan y Wang Lin Jia.
Una de ellas pudo ser despedida del aparato cuando éste colisionó contra el dique y comenzó a desintegrarse, explicó el forense del condado de San Mateo, Robert Foucrault. La otra joven fue encontrada entre los escombros del aparato, cerca de un tobogán de evacuación.
El diario San Francisco Chronicle publicó que la segunda víctima pudo ser atropellada por los primeros vehículos de emergencia que acudieron al rescate de las víctimas. La portavoz del cuerpo de bomberos de San Francisco, Mindy Talmadge, indicó que la joven «tenía heridas que apuntaban al atropello de un vehículo».
La autopsia del cuerpo será completada esta noche y se espera poder confirmar entonces este extremo.
«A la escena acudieron múltiples agencias y la Junta Nacional para la Seguridad en el Transporte (NTSB por su sigla en inglés) está llevando a cabo una investigación de toda la escena del accidente», afirmó Talmadge.
Foucrault explicó al diario Los Angeles Times que la autopsia determinará si la joven falleció debido al accidente aéreo o murió en un incidente posterior.
«Si ocurrió un incidente secundario, la gente involucrada debe estar al corriente, así como su familia», indicó.
El piloto a los mandos del avión, Kang Kook Lee, se encontraba en prácticas y sólo tenía 43 horas de experiencia en un Boeing 777, según dijo la portavoz de la compañía, Hyo Min Lee, al diario Los Angeles Times.
Se trata de un piloto experimentado y con más de 9.000 horas de vuelo en otros modelos, incluidos Boeing 747, 737 y Airbus 320.
Para Kang Kook Lee era el primer intento de aterrizaje de un 777 en el aeropuerto internacional de San Francisco y el noveno en total con ese modelo. Entre 1999 y 2004 aterrizó varias veces en San Francisco con un Boeing 737.
Su instructor de vuelo en esta ocasión era Jeong-min Lee, con más de 12.000 horas de experiencia de vuelo, incluidas 3.220 en un 777.
El avión volaba a una velocidad sustancialmente inferior a los 137 nudos (254 kilómetros por hora) que los pilotos habían programado para la aproximación a la pista de aterrizaje.
Según detallaron las autoridades, los pilotos no realizaron llamadas de emergencia y las condiciones meteorológicas eran normales cuando ocurrió el suceso.
Los registros de datos del vuelo 214, que procedía de Shanghai (China) con una escala en Seúl (Corea del Sur), indican que el piloto intentó acelerar los motores del avión aproximadamente 7 segundos antes de que la cola de la nave golpeara una barrera que separa el extremo de la pista 28 Izquierda y las aguas de la Bahía de San Francisco.
El grabador de voces en la cabina muestra que 1,5 segundos antes del impacto, los pilotos indicaron que iniciarían «una vuelta» para otro aterrizaje.
Los datos corroboran el relato de Benjamin Levy, uno de los pasajeros, que dijo a la prensa que vio por la ventanilla junto a su asiento los muelles de la bahía y pensó que estaban demasiado cerca del avión.
Según el relato de Levy, el piloto trató de acelerar los motores «justo cuando estábamos a dos o tres metros del agua», lo que pudo haber elevado la cabina y bajado la cola del avión haciendo que la parte trasera golpeara una de las barreras en la cabeza de la pista.
Los Ángeles (EE.UU.), 8 jul (EFE).-
