Un Donald Trump vestido como el líder de una banda punk y con un tupé que se mueve con vida propia es la estrella del XYZ Show, un veterano programa de guiñoles keniano creado por el humorista gráfico más conocido del este de África, Godfrey ‘Gado’ Mwampembwa.
«Estados Unidos es un país importante para Kenia, la política estadounidense es algo de lo que los kenianos están pendientes. ¡Obama es de Kenia!», explica a Efe el jefe de guionistas de los guiñoles, Loi Awat.
El popular programa de sátira política, que se emite en la televisión keniana desde 2009, nació inspirado por el espectáculo de marionetas francés «Les Guignols» («Los Guiñoles»).
Desde entonces, se ha burlado sin miedo de prominentes figuras internacionales y de las élites políticas de Kenia, un país donde la libertad de expresión a menudo se ve amordazada por las leyes y las fuerzas del orden.
«Cuando empezamos había más libertad de prensa, era un momento en que para hacer comedia no teníamos muchos problemas. Ahora hay leyes muy restrictivas, periodistas que han sido atacados… La situación es muy diferente y tenemos que pensar más en las líneas que cruzamos», explica Awat.
A escasas semanas de las elecciones presidenciales en EEUU, los muñecos kenianos han incorporado a un invitado estelar habitual ya en las televisiones de todo el mundo: el deslenguado candidato republicano caracterizado como Sid Vicious, el bajista de la banda punk Sex Pistols.
Trump es alguien «hostil, poco progresista en materia de derechos, en cuestiones de género y sexualidad, en la diplomacia», sostiene Awat.
Por eso, los guionistas del XYZ pensaron que su personaje podría estrenarse interpretando el clásico de los Pistols «Dios salve a la reina», que arremetía contra la política liberal que comenzaba a aflorar en Reino Unido a finales de los 70 y el régimen monárquico.
Enfundado en una chupa de cuero sembrada de pegatinas «anti-Hillary Clinton», con una cadena que une un «piercing» en su nariz con su oreja y mucho mal humor, el muñeco de látex cobra vida controlado por dos titiriteros, que también hacen danzar a su inconfundible tupé pelirrojo.
«No hay futuro en el régimen de Clinton, incluso Obama puede irse al infierno. Soy el futuro, el futuro de América», canta Trump, versionando a los Pistols.
El himno punk termina con el candidato republicano aporreando una batería decorada con el título «Trump Pistols», y desvelando sus planes sobre la frontera entre México y EEUU en los últimos acordes de la canción.
«Construiré el muro más alto, y México pagará por ello. Puede que la llamen ‘El muro de Trump'».
Los guionistas han incorporado a Trump porque su discurso habla de cosas con las que los kenianos lidian cada día: «La inmigración, las cuestiones de género, la población africana. Hay muchos kenianos en EEUU».
«Kenia está muy influida por EEUU, vemos sus programas escuchamos su música. Con Obama nos sentíamos muy incluidos y vinculados a EEUU», asegura Awat.
Debido al elevado coste de fabricación de las marionetas (cada una cuesta unos 5.000 dólares), Awat no sabe cuándo comenzará la producción de la última temporada, que en todo caso será antes de las elecciones generales en Kenia, previstas para agosto de 2017.
La marioneta de la aspirante demócrata se unirá al show el próximo año, pero el republicano podría eclipsar a su contrincante en el espectáculo, y eso que a los kenianos, dice Awat, «Trump no les gusta nada».Nairobi, 20 sep (EFE).-