CANADÁ – El primer ministro Justin Trudeau dice que puede comenzar un nuevo capítulo para Siria, libre de terrorismo y de sufrimiento para su pueblo.
En una publicación en las redes sociales del domingo en X, Trudeau dijo que la caída de la dictadura de Assad “pone fin a décadas de opresión brutal”.
El presidente sirio, Bashar Assad, huyó del país el domingo y ahora se encuentra en Moscú, poniendo un dramático final a su lucha de casi 14 años para mantener el control mientras su país se fragmenta en una brutal guerra civil.
El derrocamiento de Assad se produce después de que las fuerzas de la oposición entraran en la capital siria, Damasco, poniendo fin a medio siglo de gobierno de su familia.
Trudeau dijo que Canadá está siguiendo de cerca la transición e instó a mantener “orden, estabilidad y respeto por los derechos humanos”.
La ministra de Asuntos Exteriores, Melanie Joly, dijo en su propia declaración el domingo por la tarde que Canadá acoge con satisfacción el fin del régimen de Assad y que “es una oportunidad para reconstruir una Siria donde todos los ciudadanos, independientemente de su etnia, religión u origen, puedan vivir con dignidad”.
“Seguimos comprometidos a exigir cuentas al régimen de Assad ante la Corte Internacional de Justicia por la tortura y los tratos y castigos crueles, inhumanos y degradantes de su propio pueblo”, añadió Joly.
Ottawa insta a los canadienses a evitar todos los viajes a Siria y a considerar abandonar el país si es seguro hacerlo.
El líder conservador Pierre Poilievre dijo en una conferencia de prensa el domingo que Assad “era un títere de los tiranos de Teherán”.
“Ha llevado a cabo genocidios contra el pueblo sunita en su propio país, y ahora parece haber sido derrocado”, dijo Poilievre en Ottawa.
Poilievre dijo que no se sabe quién reemplazará a Assad, y agregó que no es una lucha de Canadá y que no cree que Canadá deba involucrarse.
“Debemos apoyar a nuestros aliados, incluido Israel, contra los terroristas. Debemos centrarnos en proteger a nuestro propio país”.
Ottawa describe la situación de seguridad como volátil y dijo que los aeropuertos de Damasco y Alepo, así como algunos cruces fronterizos, están cerrados.
Una alerta de viaje actualizada del gobierno canadiense advierte a las personas que eviten el país de Medio Oriente debido a lo que llama “conflicto armado en curso, terrorismo, criminalidad, detenciones arbitrarias, tortura y desaparición forzada”.
Canadá ha instado a sus ciudadanos a abandonar Siria desde noviembre de 2011, y su embajada en Damasco suspendió sus operaciones en 2012.