El número de fallecidos tras el descarrilamiento de un tren en la localidad canadiense de Lac-Mégantic subió hoy a 13 y el número de desaparecidos pasó de 40 a 50, después de que los equipos de rescate accediesen a zonas de la población afectadas por la explosión de varios vagones cisterna.
La Policía Provincial de Québec dijo que el número de muertos pasó de cinco a 13 tras el descubrimiento hoy de ocho cadáveres.
El portavoz policial, Benoit Richard, señaló durante una rueda de prensa que las nuevas víctimas mortales fueron localizadas en áreas de Lac-Mégantic donde los equipos de rescate no habían podido entrar hasta hoy.
Richard añadió que no podía identificar el lugar exacto donde se habían recuperado los restos humanos «por respeto a los familiares».
La portavoz de la oficina forense de Québec, Geneviève Guilbeault, también confirmó que la mayoría de los fallecidos tendrán que ser reconocidos a través de pruebas de ADN.
Guilbeault solicitó a los familiares y amigos de las personas desaparecidas «cepillos de dientes, sombreros o cuchillas de afeitar» de sus allegados.
El accidente se produjo en la madrugada del sábado cuando un tren sin maquinista y compuesto por cinco locomotoras y 72 vagones cisterna cargado con petróleo, descarriló y explotó en el centro de Lac-Mégantic, una población de 6.000 habitantes situada a 250 kilómetros al este de Montreal.
La explosión y posterior incendio causó la destrucción de alrededor de 30 edificios del centro de Lac-Mégantic.
Uno de los edificios donde se podían encontrar más víctimas es un popular bar, Musi-Café, en el que según uno de los supervivientes había entre 30 y 50 personas en el momento de la explosión.
El domingo, el primer ministro canadiense, Stephen Harper, visitó la localidad y dijo que era «como una zona de guerra».
Durante el transcurso del lunes, los bomberos advirtieron que la temperatura de algunos de los vagones cisterna seguía siendo demasiado elevada y que existía el riesgo de explosión.
Las autoridades también han advertido de que es posible que no se encuentren los restos de algunos de los desaparecidos debido a que las altas temperaturas del incendio de los vagones cisterna puede haber vaporizado sus restos.
Hoy, la compañía responsable del tren accidentado, Montreal, Maine & Atlantic Railway (MMA), dijo que tenía pruebas de que la locomotora de cabeza del tren había sido manipulada, lo que podía haber provocado que se desplazase sin control hacia la localidad de Lac-Mégantic.
MMA dijo el domingo a través de un comunicado que el tren había sido estacionado por su maquinista en la estación de Nantes, a unos 11 kilómetros de Lac-Mégantic, alrededor de las 23.25 del viernes (3.25 GMT del sábado), para efectuar un cambio de personal.
La compañía añadió que «la locomotora del tren cargado con petróleo y estacionada en la estación de Nantes fue apagada tras la partida del maquinista que había manejado el tren desde Farnham, lo que puede haber provocado en la liberación de los frenos de aire de la locomotora que lo mantenía estacionado».
Alrededor de la 1 de la mañana del sábado (5.00 GMT), el tren sin maquinista entró a toda velocidad en Lac-Mégantic y descarriló en el centro de la población, lo que provocó la explosión de varios vagones cisterna y la destrucción de unos 30 edificios.
Hoy, en declaraciones al periódico Montreal Gazette, Burkhardt dijo que la compañía tiene pruebas de que la locomotora de cabeza del tren accidentado había sido «manipulada».
«Tenemos pruebas. Pero esto es algo que necesita una mayor investigación. Tenemos que hablar con algunas personas que creemos tienen información», añadió.
Las compañía también dijo hoy que después de que el maquinista abandonase el tren se produjo un incendio que fue extinguido por bomberos de la estación de Nantes antes de que el convoy rodase hasta Lac-Mégantic.
Esto confirma la declaración de una testigo del accidente que el domingo señaló que había visto el tren en llamas casi dos horas antes de que descarrilase.
MMA insinuó que los bomberos que apagaron el fuego inicial pueden haber apagado la locomotora, lo que habría provocado la liberación de sus frenos. Pero el responsable de seguridad civil de Nantes dijo que su personal actuó de forma correcta y sin afectar al funcionamiento de la locomotora.
Toronto (Canadá), 8 jul (EFE).-