Dos sicarios mataron hoy a disparos a Lorena Henao, viuda de Iván Urdinola y hermana de Orlando Henao, dos excapos del cartel colombiano del Norte del Valle, confirmaron hoy a Efe fuentes de la Policía Nacional.
Según el jefe de prensa de la Policía Nacional de Colombia, el sargento Alberto Cantillo, Henao viajaba en un vehículo con un hombre y una menor de 12 años de edad, al parecer sobrina del acompañante, cuando llegaban a un condominio cercano a la ciudad de Armenia, en el centro-oeste del país.
«Entonces se aproximaron dos sicarios en una motocicleta y les dispararon. En ese momento quedaron heridos, pero fueron inmediatamente trasladados al hospital del (municipio) de La Tebaida, donde murieron Henao y el señor que se llamaba Luis Alberto Echeverri», explicó Cantillo.
La menor de edad se recupera en ese centro de salud del citado pueblo del departamento del Quindío, en el llamado Eje Cafetero.
«Los sicarios salieron raudos y a tres kilómetros del lugar de los hechos fueron capturados en una estación de gasolina», agregó el portavoz policial, quien consideró precipitado formular pesquisas sobre el móvil, pero recordó los vínculos de Henao con el narcotráfico.
Henao fue esposa del narcotraficante Iván Urdinola Grajales, fallecido en 2002 cuando estaba en prisión por un infarto derivado de una supuesta intoxicación alimentaria, y hermana de Orlando Henao, quien también murió en la cárcel en 1998, pero asesinado.
Urdinola y Orlando Henao eran, con otros dos hermanos del clan, fundadores y líderes del cartel del Norte del Valle, organización acusada por las autoridades colombianas de haber enviado a Estados Unidos unas 500 toneladas de cocaína entre 1990 y 2004.
Lorena Henao fue detenida en Panamá y deportada a Colombia en 2004, cuando aceptó ante la Fiscalía los delitos de concierto para delinquir, enriquecimiento ilícito, testaferro, fraude procesal y falsedad en documento público.
A cambio, pidió cumplir prisión domiciliaria por sufrir un «tumor maligno» que según dijo entonces le carcomía «las entrañas», y que violó seis años más tarde.
En 2010 fue recapturada en un centro comercial de Armenia e internada en una cárcel de mujeres de Bogotá hasta 2011, cuando se consideró cumplida su pena.
El cartel del Norte del Valle sustituyó en poderío al disuelto cartel de Cali, de la misma región del suroeste colombiano y liderado por los hermanos Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela, que fueron extraditados a EE.UU.