La familia de dos ciudadanos estadounidenses, Kathy Brandel y Ralph Hendry, enfrenta la angustia de la posibilidad de que hayan sido asesinados después de que su yate fuera presuntamente secuestrado en Granada. La pareja, identificada por su club náutico, estaba navegando por el Caribe Oriental en su yate, Simplicity, tras zarpar desde Hampton, Virginia, hacia Antigua.
Aunque las autoridades aún no confirman oficialmente la identidad de la pareja, la policía de Granada ha anunciado la recaptura de tres fugitivos de prisión que se evadieron el 18 de febrero y se sospecha que podrían haber causado la muerte de dos personas, posiblemente ciudadanos estadounidenses.
Nick Buro, hijo de Kathy Brandel, expresó su esperanza de encontrar a la pareja con vida, aunque evidencias en el yate sugieren escenas violentas. El interior del barco estaba desordenado, indicando un posible altercado. Buro afirmó que la pareja, experimentada en navegación, siempre priorizaba la seguridad y que este trágico incidente fue inesperado.
El esfuerzo de búsqueda continúa, y tres sospechosos vinculados al evento están bajo custodia de la policía de San Vicente, siendo interrogados. A pesar de la esperanza, las evidencias halladas en el barco generan preocupaciones sobre la posibilidad de que la pareja haya resultado herida o fallecida.
Brandel y Hendry eran navegantes experimentados que vendieron su casa años atrás para comprar el yate. Esta temporada de invierno fue la primera vez que viajaron al Caribe, un viaje que habían planeado durante años. La comunidad cristiana de Virginia, a la que estaban conectados, celebró un servicio de oración en su honor.
La asociación Salty Dawg Sailing rindió homenaje a los navegantes desaparecidos, describiéndolos como miembros valiosos. Un comunicado de la familia agradeció el apoyo recibido y pidió a otros navegantes y personas ajenas a la investigación oficial que se abstengan de realizar búsquedas adicionales. Además, expresaron gratitud a la policía y guardacostas de San Vicente y las Granadinas por su labor.
Se ha establecido una campaña de GoFundMe para ayudar a financiar la recuperación del yate y pertenencias, así como los costos funerarios y de apoyo. El Departamento de Estado de EE. UU. ha afirmado estar al tanto de la situación, mientras que la policía de San Vicente anunció que los sospechosos están cooperando en la investigación.