El líder conservador de la Cámara, Andrew Scheer, aseguró que la bancada de Pierre Poilievre apoyará el proyecto de ley del gobierno liberal para duplicar temporalmente el crédito GST.
Después de días de parlamentarios conservadores haciendo comentarios sugiriendo que apoyarían la legislación, en una entrevista, Scheer confirmó que ese será el caso y manifestó que «devolver el dinero de los impuestos a los bolsillos de los canadienses es algo que los conservadores siempre han apoyado».
La legislación, el proyecto de ley C-30, Ley de Alivio del Costo de Vida, No. 1 (Desgravación fiscal específica), fue uno de los dos proyectos presentados por los liberales la semana pasada para implementar medidas que, según el gobierno, ayudarán a las familias de ingresos bajos a modestos. llegar a fin de mes en medio de la inflación actual y las preocupaciones por el costo de vida.
El proyecto de ley modifica la Ley del Impuesto sobre la Renta para permitir la duplicación del crédito GST durante seis meses. El gobierno indicó que aproximadamente 11 millones de personas y familias recibirían un impulso a través del aumento del reembolso del GST, que administrará $2.5 mil millones en fondos adicionales a los beneficiarios actuales antes de fin de año, si el proyecto de ley se aprueba a tiempo.
Ajustado a la inflación, el crédito es un pago no imponible realizado cuatro veces al año a personas y familias con ingresos bajos y modestos, destinado a ayudar a compensar el impuesto sobre bienes y servicios/impuesto sobre las ventas armonizado que pagan, y el monto devuelto depende de los ingresos. .
Según el gobierno, aumentar el crédito significaría que los canadienses solteros sin hijos recibirían hasta $234 adicionales; una pareja con dos hijos recibiría hasta $467 adicionales; y las personas mayores, en promedio, recibirían $225 adicionales.
Ya ha comenzado el debate sobre ambos proyectos de ley, y los votos iniciales para pasarlos a la siguiente fase de escrutinio legislativo podrían llegar pronto, ya que los liberales presionan para que ambos pasen por el Senado y reciban la aprobación real antes de fin de año. La prueba definitiva del apoyo de los conservadores será cuando tengan que levantarse en la Cámara y votar sí o no.
