Bogotá, 10 ago (EFE).- Los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Venezuela, Nicolás Maduro, se reunirán mañana en territorio venezolano para «evaluar la situación de la frontera» común, cerrada desde agosto del año pasado por decisión de Caracas.
Los gobernantes analizarán la situación de la frontera con miras a la normalización de las zonas limítrofes, señaló la Presidencia colombiana, sin precisar mayores detalles del lugar de la reunión.
El encuentro presidencial se producirá una semana antes de que se cumpla el primer aniversario de la clausura de la frontera entre el estado de Táchira y el departamento colombiano de Norte de Santander, el principal entre ambos países, ordenado el 19 de agosto de 2015 por Maduro.
El presidente venezolano enmarcó la medida en su estrategia para combatir el contrabando y el paramilitarismo en las zonas limítrofes, y la extendió en las semanas siguientes a los otros puntos fronterizos.
La decisión fue acompañada de la expulsión de alrededor de 1.600 colombianos de territorio venezolano, mientras que otros 19.000 abandonaron ese país por su cuenta para no correr la misma suerte, lo que causó una crisis diplomática entre los dos países.
Santos y Maduro ya se habían reunido el 21 de septiembre del año pasado en Quito para abordar este tema, y acordaron entonces el retorno de sus respectivos embajadores y la apertura de una investigación sobre la situación de la frontera común.
En enero de este año, también en Quito, los dos mandatarios coincidieron en la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y hablaron en privado de la frontera.
Esta nueva cita tendrá lugar además menos de una semana después del encuentro que mantuvieron en Caracas el pasado 4 de agosto la canciller de Colombia, María Ángela Holguín, con su homóloga venezolana, Delcy Rodríguez, para abordar la situación en los más de 2.219 kilómetros de frontera común.
Las ministras, en un encuentro celebrado a puerta cerrada, acordaron «unas acciones preliminares que pueden ir creando el ambiente para una apertura de la frontera progresiva, gradual» de la frontera entre ambos países, informó entonces Rodríguez en una declaración conjunta con Holguín.
En julio pasado, decenas de miles de venezolanos pasaron a la ciudad colombiana de Cúcuta durante dos fines de semana por un «corredor humanitario» para comprar alimentos y medicinas que escasean en su país.