La agencia espacial rusa, Roscosmos, lanzó con éxito una nave espacial Soyuz que actuará como un bote salvavidas para tres astronautas varados en el espacio. Los dos astronautas rusos y un estadounidense abordarán la nave espacial Soyuz vacía para regresar a la Tierra.
La nave espacial Soyuz vacía se lanzó después de que en el viaje original a casa de los astronautas se produjera una fuga peligrosa mientras estaba estacionada en la Estación Espacial Internacional. La nueva cápsula Soyuz vacía debería llegar al laboratorio en órbita el domingo.
La agencia de noticias Tass indicó que la Soyuz MS-23 no tripulada despegó del centro espacial de Baikonur en Kazajistán y fue puesta en órbita. Debía acoplarse a la ISS el sábado a las 0101 GMT.
Los cosmonautas rusos Sergey Prokopyev y Dmitry Petelin y el astronauta estadounidense Francisco Rubio debían finalizar su misión en marzo. Se quedaron atrapados en el espacio después de que el sistema de enfriamiento de su cápsula Soyuz MS-22 comenzó a tener fugas hace dos meses.
La fuga de la cápsula en diciembre se atribuyó a un micrometeorito que perforó un radiador externo y lo drenó de refrigerante. Lo mismo pareció volver a suceder a principios de este mes, esta vez en un buque de carga ruso atracado. Las vistas de la cámara mostraron un pequeño agujero en cada nave espacial.
La Agencia Espacial Rusa retrasó el lanzamiento de la Soyuz de reemplazo, buscando defectos de fabricación. No se encontraron problemas y la agencia procedió con el lanzamiento de la cápsula antes del amanecer del viernes desde Kazajstán con paquetes de suministros atados a los tres asientos.
Hasta que llegue la nueva Soyuz, los planes de emergencia exigen que Rubio cambie a una cápsula de tripulación SpaceX que está acoplada en la estación espacial. Prokopyev y Petelin permanecen asignados a su Soyuz dañada ante la improbable necesidad de una huida rápida. Tener una persona menos a bordo mantendría la temperatura a un nivel manejable, concluyeron los ingenieros rusos.
