El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, afirmó hoy que la economía del país mejora, pero sigue «delicada» y añadió que seguirá con las reformas que considera adecuadas para consolidarla.
En un debate en el Senado para hablar de un supuesto caso de corrupción en su partido (PP), Rajoy dijo que no había comparecido hasta ahora para no perjudicar la confianza exterior en España, pero que ahora ha optado por hacerlo para que no cause un mal mayor.
La comparecencia del presidente español tuvo lugar por el llamado «caso Bárcenas», en alusión al exgerente y extesorero del PP, investigado por el origen de su cuantiosa fortuna y que aseguró al juez que su partido recibía donaciones irregulares de empresarios y que él mismo entregaba sobresueldos opacos a dirigentes de su formación, entre ellos Rajoy.
El jefe del Ejecutivo dijo que este caso puede «truncar» la situación económica, que «mejora, aunque es delicada» y pidió a la oposición socialista que no colabore en esa estrategia.
Aunque la coyuntura económica «no es buena», Rajoy dijo haber percibido elementos positivos recientes, como la mejora de la balanza de pagos, la reducción del déficit del sector público, la bajada de 225.000 desempleados en el segundo trimestre del año y el hecho de que se haya ralentizado la caída de la actividad económica.
Todo ello sugiere «un cambio de tendencia», en opinión de Rajoy, quien recordó también que ahora España tiene una mayor capacidad de financiación y que la prima de riesgo ha bajado notablemente desde que él accedió al Gobierno, a finales de 2011.
Madrid, 1 ago (EFE).-