Proud Boys Canada ‘se disolvió oficialmente’ después de que Ottawa lo calificara de organización terrorista

Proud Boys Canada, el grupo de extrema derecha que Canadá designó recientemente como entidad terrorista, anunció que se ha «disuelto oficialmente» y negó ser una organización terrorista o supremacista blanca, afirmaciones que deben tomarse con un «grano de sal”, según los expertos de los grupos de odio.

La declaración fue publicada en el canal Proud Boys USA en Telegram, una aplicación de mensajería donde el grupo está activo y emite sus declaraciones oficiales, según Evan Balgord, director ejecutivo de Canadian Anti-Hate Network, una organización sin fines de lucro que monitorea y investiga la actividad del odio.

La declaración, que se atribuyó a Proud Boys Canada, aseguró que el grupo «no ha hecho nada malo» y que su designación de terrorista por parte del gobierno federal «no se basó en pruebas o incidentes, sino por razones puramente políticas».

El grupo manifestó que consideraba luchar contra la designación de terrorista a través de medios legales, pero que carecía de apoyo financiero. A partir de «hoy», según la publicación del domingo, «oficialmente ya no hay Proud Boys en Canadá».

«La verdad es que nunca fuimos terroristas o un grupo de supremacía blanca», se podía leer en el comunicado. «Somos simplemente canadienses patriotas regulares».

Pero el gobierno canadiense y los expertos en lucha contra el odio no están de acuerdo. Los Proud Boys, que se describen a sí mismos como “chovinistas occidentales” y una “organización fraternal pro-occidental”, fueron formados en 2016 por Gavin McInnes, el cofundador canadiense de Vice Media, que ahora vive en los Estados Unidos.

En sus primeros días, los Proud Boys atrajeron una cobertura mediática lasciva por sus ritos de iniciación extremos (los nuevos miembros, por ejemplo, tienen que someterse a una paliza y hacerse un tatuaje de Proud Boys) y las reglas (no se permite la masturbación).

Pero desde el principio, los activistas contra el racismo y los expertos en grupos de odio se han alarmado por la retórica odiosa y nacionalista blanca de los Proud Boys. El Southern Poverty Law Center, con sede en Alabama, que designa a los Proud Boys como un grupo de odio, ha documentado la historia violenta de la organización y sus vínculos con la misoginia, la islamofobia, el antisemitismo, la supremacía blanca y los extremistas.

McInnes ha rechazado los intentos de etiquetar a los Proud Boys como supremacistas blancos o «alt-right» y, después de abandonar el grupo en 2018, demandó al Southern Poverty Law Center por designar a la organización como un grupo de odio.