El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, consideró este miércoles que vacunar a menores de 5 a 11 años no es necesario porque así lo sugieren los expertos de salud de su Gobierno, contradiciendo la última directriz de la OMS.
“Tenemos que ver si eso fue lo que recomendó la Organización Mundial de la Salud (OMS), porque yo tengo la información de los responsables del sector salud de nuestro país que sostienen incluso lo opuesto”, apuntó el mandatario desde el Palacio Nacional.
El presidente dijo que el Ejecutivo aplica “exactamente” las prioridades que la OMS ha establecido para la inmunización.
“Lo que usted (la periodista) plantea no tiene, según mi información, sustento. No lo dijo la OMS, pero vamos a aclararlo, agregó el mandatario.
Aunque luego aseguró que, de ser verdad, se escuchará a la OMS: «Vamos a hacer lo que ellos nos recomiendan».
El viernes pasado, el comité asesor de expertos de la OMS recomendó extender el uso de una dosis reducida de la vacuna de Pfizer-BioNTech contra la covid-19 para niños de 5 a 11 años.
La dosis aconsejada para este grupo de edad es de 10 microgramos en vez de los 30 microgramos para los mayores de 12 años, señaló el SAGE (el comité de expertos), que resaltó que los de 5 a 11 años constituyen la franja de prioridad más baja, salvo que tengan dolencias graves previas.
El plan de inmunización
López Obrador destacó el avance de la vacunación en México, con un 89 % de la población mayor de 18 años con al menos una dosis.
«Hay que vacunarnos. Yo creo que fue acertada la política de vacunación y desde luego fue una bendición el tener la vacuna a tiempo, en el mundo», dijo el presidente.
Insistió en que fue «muy importante» tener la vacunación porque con la nueva variante del coronavirus, ómicron, crecen los contagios, pero no al mismo ritmo la hospitalización ni los fallecimientos.
«Aparte de la pandemia, hemos tenido que enfrentar toda la campaña de desinformación perversa, porque no es que les importe la vida de las personas, les importa el dinero», criticó.
México suma 4,73 millones de casos y 303.776 decesos, siendo el quinto país del mundo por números absolutos de muertos.
El país se encuentra actualmente aplicando dosis de refuerzo en la población adulta y también inocula a menores de edad con comorbilidades y a adolescentes.