La Organización de Estados Americanos (OEA) nombró a los representantes que encabezarán su misión para mediar entre funcionarios guatemaltecos y manifestantes callejeros que buscan una transferencia ordenada al poder del presidente electo Bernardo Arévalo, según una declaración publicada en el sitio de redes sociales X.
El presidente de la OEA, Luis Almagro, dijo previamente el viernes por la noche que aceptó la invitación del gobierno de Guatemala que pedía lograr «consensos entre los diferentes sectores» del país.
El ex Ministro de Defensa de Uruguay, Luis Rosadilla, y la Secretaria de Acceso a Derechos y Equidad de la OEA, Maricarmen Plata, encabezarán la misión.
«La mencionada misión buscará reunirse con los principales actores de la situación social y política que atraviesa el país y presentará recomendaciones específicas», señala el documento publicado el sábado.
Estas sugerencias tendrían como finalidad permitir al Gobierno guatemalteco «adoptar decisiones políticas urgentes que conduzcan a la solución efectiva de los temas que son objeto de la protesta social que se desarrolla actualmente», añadió.
Decenas de miles de personas salieron a las calles de Guatemala esta semana, exigiendo la renuncia de poderosos fiscales acusados de trabajar para socavar la capacidad de Arévalo para asumir el cargo.
Rosadilla y Plata viajarán a Ciudad de Guatemala «lo más pronto posible», y los acompañará el representante de la oficina de la OEA en Guatemala, Diego Paz, precisó la organización.
Arévalo fue elegido de manera aplastante en agosto, pero desde entonces la Fiscal General Consuelo Porras ha intensificado sus esfuerzos para descalificar al partido anticorrupción Movimiento Semilla de Arévalo y ordenó redadas en las oficinas de la autoridad electoral, confiscando las papeletas.
La oficina de Porras alega que el registro del partido estuvo manchado por ilegalidades hace seis años, pero su investigación sólo se inició después del inesperadamente fuerte segundo lugar de Arévalo en la primera vuelta electoral de junio.
El fiscal general ha sido acusado de corrupción por el gobierno estadounidense.
Durante el fin de semana, las protestas se extendieron a más de 60 lugares en todo el país más poblado de Centroamérica, encabezadas por grupos indígenas, estudiantes, maestros y trabajadores médicos.
Como parte de los pasos dados para el proceso de transición, el gobierno guatemalteco dijo el sábado que habilitó oficinas para que los equipos de las autoridades electas «conozcan las diferentes instituciones y faciliten el proceso de comunicación entre los equipos».