Washington, 25 feb (EFE).- El presidente de EE.UU., Barack Obama, advirtió hoy a Rusia y a las partes implicadas en el conflicto en Siria de que «el mundo estará observando» el cumplimiento del alto el fuego que debe entrar en vigor la medianoche del sábado y reiteró que Bachar al Asad ha de dejar el poder para que haya paz.
«Los próximos días serán críticos y el mundo estará observando», alertó Obama en una comparecencia ante la prensa después de reunirse en el Departamento de Estado con su equipo de seguridad nacional.
El cese de hostilidades impulsado por EE.UU. y Rusia en Siria es «un posible paso para lograr un fin al caos» y avanzar en el combate al Estado Islámico (EI), según Obama, que precisó que no espera «que la violencia acabe de inmediato» porque el alto el fuego no cubre a los grupos terroristas que operan en el país.
«Si se implementa, (el alto el fuego) podría reducir la violencia, salvar vidas e incluso, potencialmente, llevar a una negociación sobre un arreglo político (a la guerra civil). Por eso haremos todo lo que podamos para maximizar las posibilidades de éxito», prometió el presidente estadounidense.
Según Obama, la aplicación del alto el fuego será «una prueba de si las partes están comprometidas con las negociaciones» para avanzar hacia «una nueva Constitución y elecciones».
«Estoy convencido de que ese futuro no puede incluir a Bachar al Asad. Muchos sirios no dejarán de luchar hasta que Al Asad esté fuera del poder», argumentó.
«No hay alternativa a una transición gestionada que deje atrás a Al Asad», añadió Obama, cuyo uso de la palabra «gestionada» sugiere que es posible que el líder sirio no abandone el poder de inmediato una vez haya paz, sino que lo haga en algún momento más adelante.
El mandatario subrayó que «la intervención rusa y sus bombardeos han reforzado al régimen de Al Asad y han hecho que sea todavía peor», lo que convierte el escenario en Siria en «una situación muy complicada con muchos factores en juego».
«Ninguno de nosotros se está haciendo ilusiones con esto, pero el mundo nos juzgaría de forma dura si no tratáramos» de avanzar hacia el fin de la guerra civil en Siria, agregó.
Este miércoles, Obama se declaró «muy cauteloso sobre el aumento de las expectativas» con respecto al cumplimiento del alto el fuego en Siria y confió en que al menos repercuta en «una cierta disminución de la violencia».