El presidente de EE.UU., Barack Obama, advirtió hoy que «la reducción del déficit por sí sola no es un plan económico» y señaló que el objetivo debe ser «una economía en crecimiento que cree buenos empleos para la clase media».
«La mayor nación de la Tierra no puede seguir manejando sus asuntos pasando de un crisis fabricada a otra. Comprometámonos aquí y ahora (…) a pagar nuestras deudas a tiempo y a mantener siempre el pleno crédito y la confianza de EE.UU.», dijo Obama en su discurso sobre el Estado de la Unión, en el Congreso.
Por ello, el presidente estadounidense instó a los legisladores «a dejar los intereses partidistas a un lado» y trabajar «por un presupuesto que reemplace los recortes insensatos con ahorros inteligentes y sabias inversiones en el futuro».
Aunque reconoció que la reforma del sistema impositivo y de los programas sociales «no será fácil», remarcó que la meta pasa por potenciar la creación de empleo.
«Los ciudadanos estadounidenses merecen un sistema tributario que ayude a los pequeños negocios a dedicar menos tiempo a rellenar complicados formularios, y más a expandirse y contratar gente», agregó.
Recordó, además, la importancia de que «los millonarios no puedan pagar una tasa (impositiva) más pequeña que sus secretarias», uno de los ejes fundamentales durante su campaña presidencial.
«Un crecimiento económico amplio exige un enfoque equilibrado para reducir el déficit, con recortes de los gastos y aumentos de los ingresos, y todo el mundo contribuyendo con su justa parte», indicó.
Reconoció, por ello, la necesidad de reformas en los programas sociales, como exigen los republicanos, aunque remarcó los compromisos adquiridos.
«Nuestro gobierno no debería hacer promesas que no podemos mantener, pero debemos mantener las promesas que ya hemos hecho», precisó.
(EFE).-