La Nasa indicó que aunque el asteroide 2002 AJ129 es catalogado como potencialmente peligroso, no representa una amenaza real de colisión con nuestro planeta.
La Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (Nasa, por sus siglas en inglés) informó que este 4 de febrero el asteroide 2002 AJ129 hará un increíble acercamiento a la Tierra. Se estima que la menor distancia a la que estará del planeta será de 4,2 millones de kilómetros, o mejor, 10 veces la distancia entre la Tierra y la Luna.
El asteroide, que tiene un tamaño intermedio entre los 0,5 y los 1,2 kilómetros de ancho, fue descubierto el 15 de enero de 2002 por el proyecto de seguimiento de asteroide cercanos a la Tierra, auspiciado por la Nasa, en el el sitio de vigilancia espacial Maui en Haleakala, Hawai.
Según el informe de la Nasa, durante el acercamiento máximo al planeta, el asteroide irá a una velocidad de 34 kilómetros por segundo. “Más alta que la velocidad de la mayoría de los objetos que sobrevuelan la Tierra”.
Aunque el asteroide 2002 AJ129 está catalogado como potencialmente peligroso, la agencia advierte que no representa una amenaza real de colisión con nuestro planeta en el futuro previsible.
«Hemos estado siguiendo este asteroide durante más de 14 años y conocemos su órbita con mucha precisión», dijo Paul Chodas, gerente del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA en el Laboratorio de Propulsión a Chorro, Pasadena, California. «Nuestros cálculos indican que el asteroide 2002 AJ129 no tiene posibilidad, cero, de colisionar con la Tierra, el 4 de febrero o en cualquier momento durante los próximos 100 años».
El meteorito que cayó en Estados Unidos
El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) confirmó la caída de un meteorito, el 17 de enero de este año, en las afueras de Detroit (Michigan), lo cual provocó un pequeño temblor de intensidad 2 en la escala de Richter.
Antes de que el USGS confirmase la caída del meteorito, decenas de ciudadanos compartieron en las redes sociales grabaciones del fenómeno en las que se aprecia un fogonazo de luz seguido de una aparente explosión.