El ministro canadiense de Inmigración, Jason Kenney, confirmó hoy que Rimsha Masih, la niña cristiana discapacitada paquistaní que fue acusada de blasfemia por quemar un Corán y luego absuelta por un tribunal, vive ahora en Canadá con su familia.
Kenney declaró hoy a la televisión canadiense que el caso «fue un extraordinario ejemplo de una persecución brutal» y que personalmente intervino para ayudar a la joven.
El caso de Masih saltó a los medios de comunicación de todo el mundo en agosto de 2012 cuando se supo que la joven, cuya familia es cristiana, había sido encerrada en una cárcel de máxima seguridad tras ser acusada de quemar el libro sagrado de los musulmanes.
Masih fue exculpada posteriormente por un tribunal paquistaní que consideró que el caso había sido un montaje de un religioso musulmán.
Pero la joven, de 14 años de edad, y su familia se vieron obligadas a abandonar Pakistán en marzo por temor de que su seguridad estaba en peligro.
La televisión pública canadiense CBC dijo que Rimsha, sus padres y sus dos hermanos llegaron a Canadá hace escasas semanas y se encuentran en Toronto, aunque el lugar exacto en el que residen no es conocido.
Toronto (Canadá), 30 jun (EFE).-