Nicaragua pedirá a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) le confirme como suya parte de la reserva de la biosfera Seaflower, en el mar Caribe y que ahora comparte con Colombia, informó hoy una fuente oficial.
El viceministro nicaragüense del Ambiente y Recursos Naturales (Marena), Roberto Araquistain, dijo a Efe que harán esa petición a la Unesco con base en la sentencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que el 19 de noviembre pasado redefinió los límites marítimos con Colombia.
Explicó que el Ejecutivo y la Asamblea Nacional nicaragüense preparan un decreto para nombrar una parte de Seaflower como reserva de biosfera de Nicaragua, y luego pedirán el «renombramiento» a la Unesco sobre ese sitio rico por su diversidad de especies marinas y sus arrecifes.
Seaflower, con 349.800 kilómetros cuadrados de mar, es el hábitat de más de 400 especies de peces, tiene ecosistemas completos e interconectados con la presencia de un amplio y diverso rango de hábitats y complejas formaciones coralinas resistentes a fenómenos climáticos severos que sirven de investigación científica para la adaptación al cambio climático.
«Lo que estamos queriendo decirle a la Unesco es que de este pedacito (porción) que nos dieron (la CIJ) para acá, ahora la que era la reserva de biosfera (sólo de Colombia), ahora (también) es reserva de biosfera de Nicaragua y queremos que nos la confirmen», indicó, aunque no precisó que extensión tiene.
Sostuvo que el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ha dicho que la reserva de la biosfera Seaflower la pueden manejar de forma conjunta ambos países.
La CIJ dejó en manos de Colombia siete cayos del archipiélago de San Andrés, cuyas islas mayores ya se habían concedido a este país en 2007, y otorgó a Nicaragua una franja marina en esa zona que Bogotá calcula en unos 70.000 kilómetros cuadrados y Managua en más de 90.000 kilómetros cuadrados, y que incluye parte de Seaflower.
Araquistain dijo que ahora Nicaragua cuenta con cuatro sitios de reserva de biosfera declarado por la Unesco.
Las otras son las reservas de la biosfera del Río San Juan, al sureste del país, y uno de los eslabones más importantes del corredor biológico mesoamericano, que se extiende desde México hasta Panamá; y Ometepe, única isla en el mundo con dos volcanes en medio de un lago de agua dulce.
Además, Bosawás, la mayor reserva forestal de Centroamérica que concentra el 14 % del territorio nicaragüense y al menos un 10 % de la biodiversidad mundial, considerada uno de los mejores ejemplos de bosque tropical húmedo y de bosques nubosos de la región.
«Ahora adquirimos el cuarto sitio, el Seaflower, en la plataforma continental», reiteró.
Managua, 26 ago (EFE).-