El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, dijo en Brasilia que hoy se comunicó con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien le «garantizó» que los nuevos asentamientos que construirá Israel en territorios ocupados «no interferirán» en el proceso de paz.
Estados Unidos «hubiera preferido que no lo hiciera», pero el primer ministro israelí «fue muy franco y directo, dijo que esas nuevas construcciones ya estaban programadas y aseguró que no tendrán impacto alguno en el proceso de paz», declaró Kerry en una rueda de prensa junto al canciller brasileño, Antonio Patriota.
Kerry explicó que telefoneó para Netanyahu para discutir el anuncio de que Israel construirá 1.200 nuevas viviendas en los territorios ocupados, hecho el pasado domingo.
El jefe de la diplomacia estadounidense reiteró que la política del Gobierno de Barack Obama «en relación a los asentamientos es que todos son ilegítimos» y que lo son «en cualquier momento, no sólo durante la discusión de un proceso de paz».
Aludió así a las negociaciones directas entre israelíes y palestinos que deberán comenzar el miércoles próximo en Jerusalén.
Esa ronda negociadora ha sido resultado de contactos realizados en Washington los pasados 29 y 30 de julio por los representantes de Israel y Palestina, Tzipi Livni y Saeb Erekat, respectivamente.
En esa primera ronda, Livni y Erekat diseñaron un plan de trabajo para alcanzar un acuerdo de paz en los próximos nueve meses, sin dejar fuera ninguno de los asuntos más conflictivos y comenzando por las fronteras y las medidas de seguridad.
Sobre las nuevas construcciones anunciadas por Israel también se pronunció el ministro Patriota, quien reiteró que Brasil «condena los asentamientos y considera que van en contra de resoluciones que ha sido adoptadas en el Consejo de Seguridad de la ONU».
Según el canciller brasileño, esa política del «hecho consumado no contribuye a crear el ambiente que la comunidad internacional quisiera ver» para el desarrollo de un proceso de paz.
Brasilia, 13 ago (EFE).-