Naciones Unidas, 1 oct (EFE).- El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, arremetió hoy contra la ONU por su silencio ante las «amenazas» iraníes contra Israel y propuso a los palestinos entablar «negociaciones directas de paz» sin condiciones previas.
Netanyahu dedicó la mayor parte de su discurso ante la Asamblea General de la ONU a condenar el acuerdo nuclear alcanzado en julio entre Teherán y seis potencias, y a dejar claro que Israel «no permitirá que Irán se cuele en el club mundial de armas nucleares».
Pero cuando más atrajo la atención de los presentes en la Asamblea General fue cuando se quedó en silencio durante 45 segundos, con una expresión seria en el rostro, después de denunciar el «silencio ensordecedor» de la ONU ante las amenazas iraníes de «asesinar» al pueblo de Israel.
«La ONU es obsesivamente hostil a Israel, la única democracia verdadera en Oriente Medio», aseguró el líder israelí.
Netanyahu alegó que si los gobernantes iraníes quisieran «destruir» otros países miembros de la ONU, «a lo mejor no serían tan entusiastas con el acuerdo» entre Irán y el grupo 5+1 (EE.UU., Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania).
El primer ministro israelí, prácticamente aislado en la comunidad internacional en su oposición al pacto nuclear con Irán, alertó que el gradual alivio de sanciones internacionales a Teherán no convertirá «a un tigre feroz en un gatito».
«Imaginen lo que hará Irán después de que se levanten esas sanciones, sin correa ni bozal. Irán saldrá a merodear, devorando más y más presas», aseguró.
Netanyahu advirtió que Irán «está desplegando docenas de células terroristas en todo el mundo», incluido «en este continente», el americano.
Reconoció que «no es fácil oponerse a algo que está siendo apoyado por las grandes potencias del mundo», pero insistió en que el acuerdo no es un paso hacia la paz, como han asegurado tantos dirigentes, sino que «hace más probable la guerra».
«Israel hará todo lo que sea necesario para defender a nuestro Estado y a nuestro pueblo. Si Irán planea destruir a Israel, fracasará», recalcó.
El líder israelí también aseguró que su Gobierno seguirá actuando para prevenir las transferencias de armas del grupo chií Hizbulá desde Siria y a través de ese país.
En cuanto al proceso de paz, congelado desde abril de 2014, Netanyahu aseguró que está preparado «para reanudar inmediatamente las negociaciones de paz directas con la Autoridad (Nacional) Palestina (ANP) sin ninguna condición previa en absoluto».
«Desafortunadamente, (el presidente de la ANP, Mahmud) Abás dijo ayer que no está preparado para hacerlo. Espero que cambie de opinión», sostuvo.
Abás anunció en su discurso de este miércoles ante la Asamblea General que ya no está comprometido con los acuerdos de Oslo, que desde 1993 han marcado la hoja de ruta del proceso de paz entre palestinos e israelíes.
Está por ver si Abás tomará medidas para implementar esa decisión, cuyos efectos podrían ir desde la cancelación de la cooperación en seguridad entre Israel y la ANP hasta la propia disolución de este órgano de Gobierno palestino, que fue creado en 1994 en virtud de la firma, un año antes, de los acuerdos de Oslo.
Al respecto, Netanyahu aseguró que espera «que la Autoridad Palestina cumpla sus compromisos y no se aleje de la paz».
El primer ministro israelí también rechazó las acusaciones palestinas de que Israel viola el statu quo de la Explanada de las mezquitas o Monte del Templo, donde ha habido tensos enfrentamientos.
Durante su visita a Nueva York, Netanyahu tiene previsto reunirse con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y este miércoles se encontró con la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
Lucía Leal