La revisión de un subjefe forense de las muertes por COVID-19 de tres trabajadores agrícolas migrantes en Ontario pide mejores salvaguardias y condiciones de trabajo para los trabajadores agrícolas extranjeros de temporada, una población que enfrenta barreras para acceder a la atención médica y peligros adicionales debido a las viviendas comunales.
El informe incluye 35 recomendaciones, haciendo un llamado a todo, desde un mejor acceso a la atención médica hasta una mejor comunicación entre los gobiernos y las agencias involucradas en traer trabajadores extranjeros a Canadá cada temporada de cultivo.
En 2020, los tres mexicanos murieron en mayo y junio; tenían menos de 60 años y contrajeron COVID-19 después de llegar a trabajar en las granjas de Ontario.
Ellos eran:
- Bonifacio Eugenio-Romero, quien trabajaba en una granja de pimientos cerca de Kingsville.
- Rogelio Muñoz Santos, quien trabajaba en una finca en Windsor-Essex.
- Juan López Chaparro, quien trabajaba en un huerto cerca de Simcoe.
El informe del subdirector forense de Ontario, Reuven R. Jhirad, describe los pasos para hacer que las condiciones sean más seguras para los trabajadores agrícolas extranjeros temporales. La mayoría viene a Canadá en busca de mejores salarios.
Gran parte del informe se centra en la necesidad de simplificar el intercambio de información entre las diversas agencias involucradas en traer trabajadores a Canadá. Las recomendaciones piden mejores formas de informar a los trabajadores sobre sus derechos y los servicios disponibles para ellos, incluido dónde acceder a la atención médica y la información sobre las leyes laborales.
Una recomendación pide que se establezca una única línea telefónica que permita a los trabajadores informar violaciones o inquietudes sobre las condiciones de trabajo, con información disponible en otros idiomas además del inglés o el francés.