El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, inició una investigación judicial después de afirmar que el sistema de votación electrónica del país es vulnerable al fraude.
El hombre de 66 años, que sigue a su rival de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva en las encuestas para la carrera presidencial del próximo año, no presentó pruebas que respalden sus acusaciones; pero el miércoles se enfureció contra los jueces que decidieron investigarlo.
“Esta investigación no está dentro de los límites de la constitución, por lo que el antídoto para esto tampoco está dentro de los límites de la constitución”, expresó Bolsonaro.
Los jueces anularon las condenas por corrupción del ex presidente da Silva, lo que allanó el camino para su regreso a la política.
¿Qué ha dicho Bolsonaro sobre las elecciones?
Los críticos dicen que el líder de extrema derecha está tratando de sembrar dudas si pierde en el 2022, haciendo comparaciones con el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Además, pide que se presenten recibos impresos en las urnas el próximo año, argumentando que pueden contarse fácilmente si el resultado alguna vez se disputa.
Bolsonaro ha sugerido que tal vez no acepte la decisión final del electorado y ha pedido a sus seguidores que salgan a las calles.
Su cambio propuesto al sistema de votación se encuentra actualmente ante un comité del Congreso, pero tiene pocas posibilidades de convertirse en ley.
La Corte Superior Electoral de Brasil anunció una investigación el lunes, pero le pidió a la Corte Suprema del país que emitiera su propio fallo por separado.
El juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes decidió el miércoles por la mañana investigar si el presidente ha cometido calumnias e incitado a actos delictivos al hacer sus afirmaciones infundadas.
El tribunal electoral investigará a Bolsonaro por abuso de poder, uso indebido de los canales de comunicación oficiales y fraude.
Ninguno de los tribunales aseugró cuándo se emitirán sus decisiones finales.
¿Qué podemos esperar del fallo?
En una indicación de cómo pueden ir esas investigaciones, un grupo de jueces actuales y anteriores emitieron una dura reprimenda a Bolsonaro el lunes.
Los 18 jueces emitieron un comunicado diciendo que «Brasil ha eliminado una historia de fraude electoral».
«El sistema de votación electrónica está sujeto a auditorías antes, durante y después de la elección», agregaron.
Además plantearon que todos los pasos son monitoreados por partidos políticos, fiscales, policía federal, universidades y el Colegio de Abogados de Brasil.
Si Brasil vuelve al recuento manual de 150 millones de boletas impresas, la posibilidad de fraude sería mayor, indicaron los jueces en su comunicado.