Representantes de 176 países han trazado las grandes prioridades para el control del tabaquismo en todo el mundo, desde el aumento de precios hasta el combate del tráfico ilegal, en el foro bienal antitabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS), concluido hoy en Seúl.
Tras seis días de intensas sesiones, la Conferencia de las Partes del Congreso Mundial para el Control del Tabaco (CMCT) de la OMS ha marcado a los gobiernos las pautas a seguir a la hora de crear políticas para reducir el hábito de fumar, en declive en los países desarrollados pero en pleno auge en los emergentes.
Las partes «declaran su determinación de apoyar regional, nacional e internacionalmente, iniciativas multisectoriales y coordinadas para el control del tabaco», para lo que deberán «movilizar los recursos financieros y técnicos necesarios», según la Declaración de Seúl, adoptada hoy al término del evento.
Uno de los principales avances producidos en la Conferencia de las Partes del CMCT es el llamamiento a los gobiernos a endurecer sus políticas fiscales sobre el tabaco.
«Asistir a los gobiernos para que formulen políticas tributarias rigurosas, que incluyan el incremento de impuestos generales, es la forma más directa de reducir el uso del tabaco», expresó Laurent Huber, director de la Alianza para el Convenio Marco, entidad que coordina a las organizaciones de apoyo al CMCT.
También ha ocupado un lugar prioritario en la Declaración de Seúl la lucha contra los obstáculos que plantean las grandes multinacionales del tabaco a la hora de elaborar políticas de protección de la salud pública.
Los países miembros declaran «su determinación de no permitir interferencia alguna de la industria del tabaco para ralentizar o prevenir el desarrollo y aplicación de medidas de control» sobre este producto, según la Declaración de Seúl.
«En los últimos dos años la industria tabaquera ha desplegado plenamente sus esfuerzos para presionar y coaccionar a los gobiernos en su favor al margen de la ley», indicó a Efe el director de la campaña «Desafiando a las grandes tabacaleras», John Stewart.
Aunque la conferencia del CMCT excluye de las conversaciones a la industria tabacalera, estos días se pudo observar a varios de sus representantes en los pasillos del centro de convenciones de Seúl donde tuvo lugar el foro.
Por otro lado, el uruguayo Ricardo Varela, presidente saliente de la conferencia y recién sustituido por el académico surcoreano Moon Chang-jin, destacó como el «hito más valioso» alcanzado en Seúl la firma de un protocolo para la eliminación del comercio ilícito de productos de tabaco.
A diferencia de otras directrices marcadas en la reunión -la mayoría de ellas simples pautas que los gobiernos pueden seguir o no voluntariamente- este acuerdo es vinculante, por lo que compromete a los países a legislar y cooperar para lograr la eliminación del mercado ilegal de tabaco.
El protocolo obliga a las 176 naciones integrantes del CMCT, que representan el 90 por ciento de la población mundial, a establecer en cinco años diversas medidas, como la implantación de un sistema eficaz de licencias sobre la producción y distribución de tabaco, mecanismos de seguimiento y sanciones a los infractores.
La OMS cifra el número de fumadores en el mundo en más de 1.200 millones de personas, aproximadamente un tercio de la población mayor de 15 años, y considera que el tabaco causa de forma directa e indirecta unos 6 millones de muertes anuales.
«De persistir las tendencias actuales, el tabaco ocasionará la muerte de mil millones de personas en este siglo», advirtió hoy el comunicado final de la conferencia del CMCT, en línea con las previsiones de la OMS, que estima un aumento gradual de fallecidos por esta causa hasta 8 millones al año para 2030.
La recién concluida Conferencia de las Partes del CMCT de Seúl, que tomó el relevo de la anterior cita en Punta del Este (Uruguay) en 2010, celebrará su sexta edición en Moscú (Rusia) dentro de dos años.
Inicio Secciones salud y bienestar Más de 170 países sellan su compromiso antitabaco en el foro de...