Los representantes de las principales potencias en la cumbre del clima de Marrakech (COP22) se agarraron hoy unánimemente a la expresión «transición imparable» cada vez que se les preguntaba cómo afectará a la lucha climática la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
En sus comparecencias de prensa, representantes de bloques no siempre bien avenidos en las negociaciones climáticas como es el caso de la UE, China, Arabia Saudí o Estados Unidos -este último representado todavía a través de la Administración Obama- han coincidido por separado en que el Acuerdo de París saldrá adelante «a pesar de Trump» ha llegado a decir el enviado especial de Cambio Climático de China, Xie Zhenhua.
Pero lo cierto es que a día de hoy sigue siendo una incógnita si Trump materializará o no las amenazas lanzadas en campaña electoral respecto a cambio climático: cancelar el acuerdo de París y los pagos comprometidos para mitigación y adaptación en los países en desarrollo.
A la espera de Trump, hoy los representantes políticos reunidos en Marrakech se han apresurado a poner la venda de protección al pacto alcanzado hace un año, que a día de hoy suma 109 ratificaciones.
El jefe del departamento de cambio climático de Estados Unidos, Jonathan Pershing, quien ha reconocido que nadie se ha puesto en contacto con ellos de parte del nuevo presidente, le ha lanzado un mensaje velado al ser preguntado por él: «no actuar contra el cambio climático no una opción, y no hacerlo sería ir contra los mercados y tendría graves consecuencias económicas».
Preguntado sobre qué opina de la determinación con la que China ha expresado que seguirá adelante con su transición energética independientemente de lo que haga Estados Unidos, Pershig ha dicho que «no le sorprende» ya que es la «decisión correcta de cara a su progreso» y lo contrarío sería ir «contra el crecimiento económico».
«La importancia de este momento internacional y la determinación de los países no debe menospreciarse», ha subrayado Pershing, para quien «China, la Unión Europea, Brasil… todas las partes están motivadas a seguir impulsando la acción climática».
El hombre que recorrió el mundo en 2015 sumando voluntades políticas para alcanzar un pacto global de lucha contra el calentamiento en París, el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, llega mañana a Marrakech decidido a hablar de la «urgencia de la acción climática y la necesidad de que los países incrementen la ambición de sus promesas para el Acuerdo de París», ha dicho Pershig.
El comisario europeo de Acción por el Clima, Miguel Arias Cañete, no se ha quedado atrás en sus declaraciones. El exministro español ha advertido a Trump que «un líder inteligente no debe resistirse a las tendencias de los mercados ni al progreso de su país», ya que la transición hacia una economía baja en carbono será la clave de la «competitividad y creación de empleo» los próximos años.
Arias Cañete ha vuelto a defender con fervor su Coalición de la Alta Ambición, creada el pasado año en la COP21 de París para promover decisiones ambiciosas en materia de cambio climático, y ha dicho que los 130 que ya la componen, incluido Estados Unidos a través de la Administración Obama, «continúan unidos».
Ante la insistencia de los periodistas el comisario ha acabado diciendo que «habrá acción climática independientemente de quien sea el presidente de Estados Unidos», y que si Trump decide salirse del Acuerdo de París «nadie está obligado a estar donde no quiere».
«A día de hoy somos 109 los países los que en menos de un año hemos ratificado el Acuerdo de París, suponiendo el 77 % de las emisiones globales, si Estados Unidos se va seguiríamos siendo 108», ha apuntado.
Mañana, más de 70 jefes de Estado y de Gobierno tratarán de mantener ese optimismo en sus intervenciones en los plenarios de Marrakech en una jornada en la que está previsto que aprueben una declaración política denominada «Llamada a la acción climática de Marrakech».
El optimismo generalizado se ha visto recompensado hoy con un buen dato científico: las emisiones de CO2 se han estabilizado en 2016 por tercer año consecutivo.
Está por ver, sin embargo, si el entusiasmo se mantiene dentro de un año en la COP23 cuya sede es, de momento, el único acuerdo de esta cumbre: tendrá lugar en Bonn bajo la presidencia de Fiji.
Para enfriar los ánimos hoy la Organiación Meteorológica Mundial dijo hoy en Marrakech que la temperatura global del planeta romperá con toda probabilidad récords de calor en 2016, como ya lo hizo en 2015.
El aumento de temperaturas ha ido asociado además a registros récord en otros fenómenos como la disminución del hielo ártico, los incendios forestales, la mengua de la barrera de coral y el aumento de fenómenos extremos como los ciclones, los maremotos y las sequías de grado severo, según las mediciones de la WMO.
Caty Arévalo.
Marrakech (Marruecos), 14 nov (EFE).-