La escasez de camas de hospital para niños enfermos preocupa a las autoridades y padres de familia, ya que la temporada temprana del virus está golpeando fuerte y provocando un aumento sin precedentes en los pacientes pediátricos.
Además de COVID-19 y la temporada de gripe, un aumento significativo en una enfermedad común conocida como virus respiratorio sincitial (RSV) significa tiempos de espera más largos para ver a un médico, y lamentablemente, el problema empeoraría a medida que llegue el invierno; los expertos en salud temen una “tripledemia”.
Se advierte a los padres que podría llevar hasta 12 horas ver a un médico y más de 24 horas conseguir una cama.