El candidato socialista prorruso Igor Dodon y la europeísta Maia Sandu, que se disputan el liderazgo de Moldavia en la segunda vuelta de las presidenciales que se celebra hoy en la antigua república soviética, llamaron a sus partidarios a la calma independientemente de los resultados de la votación.
«Espero que podamos evitar protestas. Quiero dirigirme a nuestros oponentes para que sigan de cerca el proceso de votación. Y cuando estén los resultados, que los reconozcan», dijo tras votar el candidato prorruso, al que las encuestan dan como seguro ganador de los comicios.
El líder socialista, un economista de 41 años que aboga por revisar las relaciones con la Unión Europea (UE) para acercarse a Rusia, ya quedó a las puertas de la victoria con el 47,98 % de los sufragios hace dos semanas, en la primera vuelta.
«Según todas nuestras valoraciones de lo que quieren los ciudadanos de Moldavia, creo que la victoria hoy será nuestra a una gran distancia» de la candidata de centroderecha, aseguró Dodon.
Sandu, de 44 años y firme defensora de la integración del país en la UE, también se mostró segura de lograr la victoria y llamó a la «calma» a los ciudadanos al ser preguntada si sacará a la calle a sus partidarios en caso de que gane el candidato prorruso.
«Estoy seguro de que ganaremos, teniendo en cuenta todo el esfuerzo emprendido por mucha gente y la movilización de la diáspora moldava en el exterior», apuntó tras depositar su papeleta en uno de los colegios electorales de Chisinau.
El primer ministro moldavo, el europeísta Pavel Filip, abogó por la cooperación entre su Gobierno y el futuro jefe de Estado, y manifestó su esperanza de que el ganador de las elecciones siga el curso de su gabinete, enfocado al acercamiento a Occidente.
«Espero que el presidente electo se olvide de la retórica electoralista y trabaje junto al Gobierno. Tenemos una hoja de ruta con la UE, un acuerdo con el FMI y estamos en negociaciones con el Banco Mundial», señaló Filip en un claro mensaje a Dodon, admirador declarado del presidente ruso, Vladímir Putin.
Durante toda la campaña electoral, el político socialista ha señalado que su principal objetivo es sellar una alianza estratégica con Rusia y revisar el Acuerdo de Asociación entre Moldavia y Bruselas.
Pese a esas declaraciones, su posible victoria no supondrá cambios inmediatos en la política de Chisinau, ya que según la Constitución moldava el poder Ejecutivo reside en el Gobierno, que es nombrado por el Parlamento, y las funciones del jefe del Estado son sobre todo representativas.
Pero, al mismo tiempo, una victoria de Dodon dejaría a los socialistas en condiciones inmejorables para hacerse dentro de dos años con el control del Parlamento y, por tanto, del Gobierno.
Estas elecciones son los primeros comicios presidenciales directos que se celebran Moldavia desde 1996, ya que a partir de entonces y hasta ahora la elección del jefe del Estado fue prerrogativa del Parlamento.
Los colegios electorales permanecerán abiertos hasta las 21.00 hora local (19.00 GMT), tras lo cual se dará comienzo al escrutinio.
Al igual que en la primera vuelta, los comicios no se celebran en la región separatista de Transnistria, por lo que la Comisión Electoral Central moldava ha habilitado colegios electorales junto a sus límites para que los ciudadanos residentes en ella puedan ejercer su derecho a voto.
Moscú, 13 nov (EFE).-