La campaña para las elecciones del domingo en El Salvador culminó hoy sin un claro favorito, aunque los dos principales candidatos aseguraron que ganarán sin necesidad de ir a una segunda vuelta como anticipan las encuestas.
El candidato presidencial opositor, Norman Quijano, de Alianza Republicana Nacionalista (ARENA, derecha), cerró su campaña hoy coincidiendo con el último día permitido por la ley para hacer proselitismo.
«El 2 de febrero, nos vamos a alzar con una victoria en primera vuelta», proclamó Quijano.
El candidato opositor subrayó que «mi principal compromiso como presidente de la República será trabajar por tu seguridad y la de tu familia», al dirigirse a los salvadoreños en su discurso en un acto masivo en la Plaza Libertad, en el sector céntrico de San Salvador.
Por su parte, Salvador Sánchez Cerén, del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda), aunque cerró oficialmente su campaña el sábado anterior, celebró hoy una concentración en Soyapango, a unos seis kilómetros al este de San Salvador.
«Vamos a triunfar en primera vuelta», reafirmó el candidato del FMLN en su discurso, y destacó que si gana los comicios le dará continuidad y ampliará «esta nueva era de transformaciones» que vive el país en el Gobierno del presidente Mauricio Funes.
Sánchez Cerén, actual vicepresidente salvadoreño y excomandante guerrillero, reiteró que ARENA no volverá al poder que ocupó durante 20 años consecutivos, entre 1989 y 2009.
Quijano y Sánchez Cerén figuran como favoritos entre los cinco candidatos, pero ninguno llega al 50 % más uno de las preferencias para ganar en primera vuelta, según los sondeos.
Tras culminar hoy la campaña, desde mañana ningún partido político podrá pedir el voto, insistió a Efe el magistrado del Tribunal Supremo Electoral, Eduardo Urquilla.
Subrayó que durante los próximos tres días habrá «un período de reflexión» en el que los salvadoreños podrán analizar «a quién van a favorecer con el ejercicio del sufragio».
Los últimos días de la campaña se han caracterizado por la profusión de anuncios políticos a través de los medios de comunicación y de actos proselitistas de los candidatos.
Horas antes de su concentración de cierre, Quijano se mostró tan seguro del triunfo que presentó en un acto público a un grupo de políticos y profesionales de su partido que le asesorará en la conformación de su eventual gabinete de Gobierno.
Quijano, alcalde de San Salvador, afirmó a los periodistas que será «un presidente cercano a las familias más humildes, más necesitadas».
«Seremos los más poderosos aliados en la lucha contra la pobreza y las desigualdad», aseveró.
El político opositor afirmó que se preocupará por «la calidad de vida» de los salvadoreños, «pero sobre todo de garantizarles la vida», porque «no van a tener a un presidente negociando con maras, con delincuentes».
Quijano aludió así a que supuestamente el Gobierno de Funes negoció con las pandillas más violentas de El Salvador una «tregua» o pacto de no agresión que, según las autoridades, ha bajado los homicidios en un 52 % desde marzo de 2012.
El Gobierno niega haber negociado con los pandilleros y sostiene que sólo es un «facilitador» de la «tregua».
«Los mareros (pandilleros) mandan e imponen su propia ley en colonias y comunidades del país» porque «este Gobierno, como no pudo vencer al enemigo, se unió a ellos», sostuvo Quijano.
El expresidente Elías Antonio Saca (2004-2009), candidato del movimiento Unidad, un grupo de tres partidos minoritarios de derecha, también celebró hoy distintas actividades de cierre de campaña, incluida una reunión con un grupo de excombatientes de la guerra civil (1980-1992) que le prometieron su apoyo.
René Rodríguez y Oscar Lemus, candidatos de los minoritarios Partido Salvadoreño Progresista y Fraternidad Patriota Salvadoreña, respectivamente, también concluyeron hoy sus campañas.
Quijano y Saca, junto a sus compañeros de fórmula y dirigentes de sus partidos, también tendrán esta noche sendas comparecencias a través de cadenas locales de radio para hacer los últimos llamamientos a sus votantes.
Un total de 4.955.107 salvadoreños están convocados para elegir al sucesor de Funes, el primer presidente de izquierda que ha tenido el país.
San Salvador, 29 ene (EFE).-