Un tanto desde el punto blanco de penalti decretó el 2-1 a favor del equipo que sigue liderando la Premier League de Inglaterra.
Un penalti transformado por el egipcio Mohamed Salah a un cuarto de hora del final consumó la remontada ante Tottenham del Liverpool en Anfield (2-1), que se reencuentra con el triunfo tras el empate cosechado en la pasada fecha en Old Trafford.
Sufrió el conjunto de Jurgen Klopp para sumar los tres puntos en la reedición de la última final de la Liga de Campeones. El Tottenham marcó pronto y protegió hasta el límite su ventaja, sostenido por el meta argentino Paulo Gazzaniga, sustituto de Hugo Lloris, lesionado. No está bien el conjunto londinense, fuera de la parte alta. Dos derrotas y un empate marcan sus últimos compromisos en la campaña más gris de los Spurs en los tiempos recientes.
Sin embargo, mantuvo el ritmo todo el partido. Tomó ventaja al minuto de juego, cuando un tiro del coreano Son Heung-min fue desviado por Virgil Van Dijk y devuelto por el larguero. El rechace cayó a la cabeza de Harry Kane, que llevó la pelota a la red. La Premier volvía a estar abierta. El Manchester City, que ganó el sábado al Aston Villa, estaba a solo tres puntos en ese momento.
El acoso del cuadro de Klopp fue incesante. Pero se topó una y otra vez con Gazzaniga. El Tottenham, sin embargo, pudo sentenciar al inicio de la segunda parte, cuando un disparo de Son, con el meta Alisson superado, se estrelló en el larguero. Y a continuación llegó el empate. Un balón enviado al área por Georginio Wijnaldum fue a los pies de Jordan Henderson, dentro del área, que cruzó el balón fuera del alcance del meta argentino.
Y a un cuarto de hora del final, una aparatosa entrada de Serge Aurier al senegalés Sadio Mane alivió a los locales. Salah no falló desde los once metros y dio la vuelta a la situación y el triunfo al Liverpool. Los reds mantienen su ventaja en el liderato. Superan en seis puntos al Manchester City, segundo, y en ocho al Leicester y Chelsea.