El ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, dijo hoy que el cese de los bombardeos y operaciones por parte de las fuerzas aéreas rusas en Alepo es «un gesto de buena voluntad» para tratar de que se separe a la oposición moderada de los terroristas.
«El cese del fuego ha entrado en vigor. El cese de los vuelos de la aviación rusa y siria es un gesto de buena voluntad con el deseo de que la pausa anunciada pueda ser utilizada para que, por fin, se separe del Frente al Nusra y grupos similares a los otros que son armados, apoyados y equipados por Estados Unidos, países europeos y otros de la región», señaló.
Precisamente, Lavrov, que hizo estas declaraciones en rueda de prensa junto al ministro de Exteriores paraguayo, Eladio Loizaga, adelantó que mañana, miércoles, en Ginebra se reunirán expertos militares de Rusia y EEUU para tratar este tema.
«Esto (separar a los yihadistas de los grupos opositores) nos lo prometieron hace mucho tiempo, en febrero de este año, como mínimo, pero no se ha hecho nada por diversos motivos», recordó.
El jefe de la diplomacia rusa instó también a la oposición armada siria a firmar lo antes posible el acuerdo de cese del fuego, en virtud de la iniciativa ruso-estadounidense.
A su vez, advirtió que existe el riesgo de que las fuerzas del Estado Islámico que están siendo bombardeadas por la coalición encabezada por EEUU en la ciudad iraquí de Mosul puedan dirigirse a Siria.
Esta mañana, el ministro de defensa ruso, Serguéi Shoigú, anunció que la Fuerza Aérea rusa y el Ejército sirio cesaban sus operaciones en Alepo de cara a una tregua humanitaria a partir del día 20 de octubre.
El Estado Mayor del Ejército ruso anunció que el objetivo de esa «pausa humanitaria» es permitir la salida de los civiles y también de los combatientes de esa ciudad siria.
Moscú, 18 oct (EFE).-