Moscú, 25 dic (EFE).- El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, expresó hoy su firme respaldo a aquellos países que apoyan el pronto inicio de las negociaciones sirias, pese a los desacuerdos sobre el futuro del presidente de Siria, Bachar al Asad.
«Destacamos la positiva evolución de las posturas de muchos de nuestros socios que, aún insistiendo en la ilegitimidad del régimen de Al Asad, abogan al mismo tiempo por el pronto inicio de las negociaciones entre el Gobierno de Siria y un amplio abanico de la oposición», dijo Lavrov en rueda de prensa.
Lavrov, quien hizo estas afirmaciones tras reunirse con su colega catarí, Jaled al Atiya, subrayó que «Moscú apoya activamente tal postura» y expresó su confianza en que en enero ambas partes se sienten ya a negociar el futuro político del país árabe.
Reconoció que el principal obstáculo para la convocatoria de dicho encuentro es la lista de grupos que deben representar a la oposición Siria, ya que algunos de los propuestos por Catar, Arabia Saudí y Turquía son considerados terroristas por Damasco y Moscú.
«Por el momento, no hemos conseguido aclarar totalmente quién va a representar a la oposición en las negociaciones y quién será visto como un socio inaceptable, como organización terrorista o extremista», dijo.
También admitió que sigue sin haber consenso sobre el papel de Al Asad en Siria, ya que Rusia desvincula su suerte de las negociaciones, pero Occidente y muchos países del Golfo Pérsico exigen insistentemente su renuncia.
Al respecto, Lavrov recordó que miles de guerrilleros de diferentes países del mundo, incluido Rusia, combaten en territorio sirio en las filas del grupo terrorista Estado Islámico (EI), lo que supone una burda violación de la soberanía siria.
Por su parte, Al Atiya acusó a Al Asad de perder toda legitimidad tras convertirse en «uno de los principales patrocinadores del terrorismo» en Oriente Medio.
«Nuestro país considera que Al Asad es un presidente ilegítimo, especialmente después de usar armas químicas y otro armamento prohibido contra su propio pueblo», dijo.
Al Atiya subrayó que «en el futuro él no puede encabezar Siria» y que Catar, al igual que otros países como Arabia Saudí y Turquía, «no vemos que Al Asad pueda ocupar un lugar en el futuro de Siria».
Por otra parte, negó que la recién creada alianza islámica antiterrorista -que incluye a países como Arabia Saudí, Jordania, Emiratos Árabes Unidos, Pakistán, Libia, Turquía, Egipto, Marruecos o Nigeria- haya abordado la posible creación de un brazo militar para combatir al EI en Siria e Irak.