Latinoamérica debe prepararse para el «irreversible» crecimiento de sus ciudades que va a ser «totalmente urbano», con una disminución del peso de las migraciones rurales, recomendó hoy el foro «Ciudades Sostenibles para el bienestar de todos y todas» convocado por la ONU.
El encuentro internacional, previo a la celebración de la XXIII Cumbre Iberoamericana los próximos días viernes y sábado en Panamá, advirtió en sus conclusiones que los estados tiene que fortalecer a los gobiernos locales para atender estos cambios y articular una estrategia preventiva ante el riesgo de desastres.
En cualquier región no puede hablarse de desarrollo sostenible si existen círculos de pobreza, además de la ausencia de servicios de salud, educación y empleo, señaló a Acan-Efe la directora regional del Fondo de Población de la ONU, Marcela Suazo.
«No podemos hablar de desarrollo sin tomar en cuenta las dinámicas de la población, por ello cuando en las ciudades encontramos algunos círculos de pobreza, y la ausencia de importantes servicios y acceso a salud, agua, saneamiento y educación, no podemos hablar de que es una ciudad sostenible», indicó Suazo.
«El crecimiento urbano se está generando de manera predominante y creciente por el crecimiento natural de las ciudades, diferenciándose de las tendencias pasadas donde el factor dominante ha sido la migración del campo a la ciudad», señala como un factor fundamental para la planificación futura.
Agrega que otro elemento crucial es el de la fecundidad, cuyos picos más altos se dan entre la población más pobre y tiene que ser considerados a la hora de dictar políticas públicas para prevenir un agravamiento de sus carencias.
«Las diferencias en los niveles de fecundidad por grupos sociales determinan que los mayores aportes relativos al crecimiento urbano se generen en los segmentos de la población urbana pobre, agregados a los aportes de los migrantes rurales, también predominantemente pobres» y son los que ocupan los tugurios.
Por su parte, la directora regional adjunta del Programa para el Medio Ambiente de la ONU (PNUMA), Mara Murillo, dijo a Acan-Efe que para hablar de desarrollo sostenible, los gobiernos deben tomar en cuenta sus tres pilares: economía, sociedad y ambiente.
«El grave problema que enfrentamos es que no hemos logrado la integración de estos tres elementos», precisó Murillo al tiempo que indicó que es por ello que el PNUMA sigue promoviendo la iniciativa lanzada en 2007, conocida como «economía verde».
Por ello los expertos consideraron que la tendencia demográfica va a impactar la sostenibilidad y el bienestar en los espacios urbanos.
«El riesgo de desastres adquiere un perfil cada vez más urbano y sigue un patrón espacial asociado al crecimiento no planificado de las ciudades», con mayor exposición a las inundaciones y otras amenazas hidrometeorológicas, señalan.
Manifestaron que las condiciones generales en que se da el aumento de la población urbana y el incremento del riesgo son, entre otras cosas, «reflejo de estructuras de gobernanza urbana débiles».
«Esto se manifiesta en los asentamientos informales, las viviendas precarias, la falta de servicios básicos y las condiciones generales de pobreza, las que denotan una falta de planificación y gestión del crecimiento urbano», insisten.
Dentro de este cuadro, «el rol de los gobiernos locales y el empoderamiento de los sectores pobres urbanos cobra cada vez mayor relevancia», apuntan.
Los expertos recomendaron estrategias que ayuden a ralentizar el crecimiento urbano «y ganar tiempo para adecuar el espacio y las instituciones para una respuesta más eficaz y por otro, oriente de manera más positiva el crecimiento inexorable desde una perspectiva de garantizar y profundizar el ejercicio de derechos de la ciudadanía».
En el encuentro sobre «Ciudades Sostenibles» participaron representantes de diversos sectores de Iberoamérica, quienes analizaron la temática desde las perspectivas de crecimiento y sostenibilidad, seguridad, resiliencia y financiación.
Según el Sistema de las Naciones Unidas, Latinoamérica es la región de mayor proporción de población urbana (cerca de 85 %) de todas las regiones en desarrollo, y la segunda más urbanizada del mundo, por lo que los desafíos del desarrollo sostenible, las políticas públicas inclusivas y la resiliencia son aún mayores.
La población latinoamericana ha pasado de 167 millones en 1950 (41,4 % urbana) a 596,6 millones en 2011 (79,1 % urbana) y en 2050 será de 751 millones (86,6 % urbana), según cifras expuestas en el encuentro y plasmadas en el informe final.
En la inauguración del foro, el secretario general Iberoamericano, Enrique Iglesias, dijo que el tema de las ciudades sostenibles es uno de los de mayor discusión en la actualidad, en la que algunos sostienen que solo «dan problemas», mientras que otros afirman que ofrecen también «enormes oportunidades».
Entre tanto, el representante permanente de El Salvador en la ONU, Carlos García González, señaló que Iberoamérica es el «actor» que dentro de las Naciones Unidas puede «potenciar y presionar», para que pueda desarrollarse una agenda sobre las ciudades sostenibles.
Panamá, 16 oct (EFE).-