La Organización Mundial de la Salud (OMS) insta a las personas completamente vacunadas a que sigan usando máscaras faciales y continúen implementando las medidas de distanciamiento físico, debido a los nuevos brotes provocados por la variante Delta.
En una conferencia de prensa en Ginebra, los funcionarios de la OMS explicaron que las mascarillas deben permanecer puestas, incluso para aquellos que han recibido ambas dosis de una serie de vacunas.
«La vacuna por sí sola no detendrá la transmisión comunitaria», indicó Mariangela Simao, subdirectora general de la OMS para el acceso a medicamentos y productos de salud. «La gente necesita seguir usando máscaras de manera constante, estar en espacios ventilados, con higiene, distancia física, evitar el hacinamiento».
Simao agregó que las medidas de salud pública siguen siendo «extremadamente importantes» a medida que los países hacen frente a los brotes de la variante COVID-19 Delta, a pesar de las altas tasas de vacunación.
«Las personas no pueden sentirse seguras solo porque han recibido las dos dosis. Aún necesitan protegerse», aseveró Simao.
Si bien las vacunas COVID-19 han demostrado ser efectivas para prevenir enfermedades graves y la muerte, incluso contra la variante Delta, los funcionarios de la OMS enfatizan que es una «variante peligrosa» y que las personas completamente vacunadas pueden ser parte de su cadena de transmisión si no se mantienen las medidas.
La noticia llega mientras los países continúan flexibilizando las medidas de salud pública y ofrecen nuevas pautas para quienes están completamente vacunados.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. anunciaron el 13 de mayo que los estadounidenses completamente vacunados no necesitan usar máscaras al aire libre y pueden evitar usarlas en interiores en la mayoría de los lugares.
La guía canadiense, publicada el jueves, sugiere que aquellos que están completamente vacunados contra COVID-19 pueden abrazarse, asistir a barbacoas e invitar a un pequeño grupo de amigos a cenar sin usar una máscara o permanecer separados.
Sin embargo, la Agencia de Salud Pública de Canadá manifestó que los canadienses podrían querer protegerse en ciertas situaciones, como en conciertos llenos de gente, eventos deportivos o fiestas en casa.
La variante Delta, identificada por primera vez en India, ahora se ha convertido en la cepa dominante en el Reino Unido y representa aproximadamente una de cada cinco nuevas infecciones por coronavirus en los EE. UU.
Entre el 25 de abril y el 23 de mayo, Canadá experimentó un aumento de cuatro veces en la proporción de casos de Delta, y la mayoría de ellos se encontraron en personas no vacunadas o parcialmente vacunadas, según los últimos datos de modelos.
El modelo muestra que si la variante Delta se convierte en la cepa predominante, Canadá podría volver a correr el riesgo de exceder la capacidad de hospitalización, ya que la variante es un 50% más transmisible que la cepa original de COVID-19 y da como resultado infecciones más graves.
Sin embargo, si Canadá alcanza alrededor del 80% de la población completamente vacunada, el modelo sugiere que podría evitarse una cuarta ola.
Hasta que se alcance ese nivel de vacunación masiva, Tam sugirió que las medidas de protección personal, como el uso de mascarillas, seguirán siendo importantes.
