Educación es lo que piden las mujeres en África para que haya más oportunidades para ellas y puedan contribuir al «renacimiento económico» del continente con sus propios proyectos de empresa.
Así lo han expresado empresarias y líderes políticas en el VIII Congreso de Mujeres Emprendedoras Africanas, que se celebra esta semana en El Cairo y que ha atraído a cientos de participantes de todos los rincones del continente.
«No puede haber un renacimiento en África sin mujeres. De hecho, para un desarrollo económico hay que concentrarse en su papel y en el de los jóvenes», dijo a Efe la empresaria Amani Asfur.
Esta egipcia que preside la Asociación de Mujeres Emprendedoras de su país cree que las empresarias necesitan apoyo gubernamental para poder trabajar y ofrecer productos competitivos en el mercado internacional.
Aparte del respaldo oficial y de la financiación, Asfur destacó que la educación es esencial porque sin ella no puede haber «un verdadero renacimiento económico».
Un ejemplo de superación ante las dificultades es el caso de la emprendedora sursudanesa Keny Check, que no recibió ayuda de nadie para montar un salón de belleza y cultivar judías para luego venderlas en Yuba.
«No he pedido ayuda a nadie, ni al Gobierno, solo tenía claro mi objetivo, lo tenía bien planeado y me he esforzado mucho. Por eso, he conseguido lo que quería», afirmó a Efe Check, que forma parte de la nutrida delegación del Sur de Sudán, uno de los países más pobres de África, en el congreso, que se clausura mañana.
También asisten mujeres de Nigeria, Kenia, Senegal y Malaui, que han traído a la capital egipcia muestras de artesanía fabricadas por ellas mismas, como alegres bolsos de colores, estatuas de madera, accesorios coloridos y manteles cosidos a mano.
La antigua vicepresidenta del Gobierno española María Teresa Fernández de la Vega, líder de la Fundación Mujeres por África, consideró, en declaraciones a Efe, que la educación «es la única vía para conseguir la libertad de las mujeres».
En su opinión, las africanas son el principal elemento de desarrollo del continente. «Son ellas quienes mantienen el 90 % de la economía informal, son las que producen el 80 % de los alimentos y mantienen al 40 % de las familias».
«Si África está avanzando como lo está haciendo es por el empuje, el impulso y la iniciativa de las mujeres», resaltó.
Durante su intervención el congreso, Fernández de la Vega subrayó que al avance de sus congéneres en África ha contribuido su presencia en «puestos de responsabilidad hasta ahora reservados a los hombres», como ministras de finanzas, juezas y responsables de bancos e instituciones financieras.
Ese es el caso de la presidenta de la Unión Africana (UA), Nkosazana Zuma, la primera mujer que ocupa este cargo en la Historia y también presente en la conferencia.
Recibida con gritos de alegría por parte de sus compañeras, Zuma dijo que «las mujeres tienen que aprovechar su número en el mundo para obtener políticas a su favor de ellas, leyes y un buen nivel de educación».
«La educación es un asunto clave, ahora la mayoría de mujeres africanas van por el camino recto hacia la posición que se merecen», aseguró.
Por Mary Fayez/El Cairo, 24 abr (EFE).-