La Policía chilena impidió hoy la realización de una marcha convocada en la norteña ciudad de Antofagasta contra los inmigrantes colombianos, que tuvo una escasa asistencia y no estaba autorizada por el Gobierno, que la declaró ilegal.
No más de unas 70 personas llegaron hasta la céntrica plaza Sotomayor de la ciudad, situada a unos 1.360 kilómetros de Santiago para sumarse a la manifestación, convocada a través de redes sociales que denunciaban un supuesto aumento de la delincuencia debido a la masiva llegada de colombianos a la zona.
La región de Antofagasta disfruta una época de prosperidad debido principalmente a grandes explotaciones mineras, lo que ha atraído, según las autoridades, a más de 50.000 inmigrantes, principalmente bolivianos, peruanos y colombianos, de los que hay unos 15.000.
De ellos, unos 11.000 viven en la capital regional (Antofagasta), donde el pasado 11 de octubre hubo una pelea callejera entre hinchas de fútbol, tras el partido que jugaron en Barranquilla (3-3) las selecciones de ambos países, en el marco de las eliminatorias al Mundial de Brasil 2014.
La riña fue controlada por la Policía, que detuvo a varios participantes, pero desde entonces comenzó a circular la convocatoria a la marcha, sustentada por consignas y frases xenófobas y racistas.
Hasta el intendente (gobernador) regional, Waldo Mora, mostró al comienzo simpatía con la convocatoria, aunque tras conocerse la posición contraria del Gobierno dijo al diario La Tercera que no la autorizaría porque «va en contra de toda la política histórica que ha tenido este país respecto a la recepción de los extranjeros».
También la alcaldesa Karen Rojo, que primero dijo que había que «ordenar» la llegada de extranjeros y mejorar el control de ilegales, posteriormente calificó de «xenófoba» e «inaceptable» la convocatoria.
Los que llegaron hoy a la plaza entonaron el himno nacional chileno e intentaron, en medio de discusiones con grupos detractores de la discriminación, iniciar la marcha, pero fueron raudamente disueltos por la Policía, sin que los enfrentamientos verbales pasaran a mayores.
Los convocantes alegaban que la manifestación no buscaba menoscabar a los colombianos, sino mejorar la ley de migración para un mejor control de quienes llegar del exterior a radicarse en Chile.
El comandante de Carabineros (Policía militarizada) Carlos Cubillos destacó a los periodistas que en general las personas acataron la acción de los efectivos y cooperaron para que no hubiera incidentes.
En declaraciones a Radio Cooperativa en la ciudad de Coquimbo (norte), el ministro chileno del Interior, Andrés Chadwick, reiteró que los extranjeros son «bienvenidos» en Chile y que no corresponde realizar marchas y promover enfrentamientos por la presencia de inmigrantes.
Agregó que en Chile existen procedimientos legales para que los inmigrantes regularicen su permanencia en el país y también para los casos de quienes no lo hacen.
En la ciudad de Arica, en la frontera con Perú y Bolivia y a unos 700 kilómetros al norte de Antofagasta, varias decenas de personas se manifestaron en contra de la discriminación, en respuesta a la convocatoria de la marcha en Antofagasta.
El Gobierno colombiano, a través de un comunicado del Ministerio de Exteriores, había manifestado también su preocupación por la convocatoria y llamado «a la tolerancia y al respeto» para que no se promuevan actos que inciten a la violencia.
Santiago de Chile, 19 oct (EFE).-