Por Enrique Kogan – Syndicate Auto News Wire
Debido a la pandemia, el tráfico en las carreteras típicamente congestionadas, como la I-405 en Los Ángeles, hoy es casi inexistente.
Según los datos del servicio de navegación TomTom, el tráfico en la ciudad de Los Ángeles apenas alcanza la mitad de lo que sería en tiempos más normales y en los últimos días, ha estado inactivo hasta en un 85%.
Esta tendencia de carreteras desiertas también ocurre en otras ciudades importantes de los Estados Unidos, incluidas Miami, Dallas, Nueva York, Atlanta y Chicago.
Según dice CCC Information Services, una compañía que brinda soluciones tecnológicas para las industrias automotriz, de reparación y de seguros, cita que los bloqueos relacionados con la pandemia del coronavirus como un factor importante, hará que los conductores estadounidenses no solo conduzcan menos durante todo 2020, sino que experimenten la mayor disminución de tráfico en medio siglo.
Aunque los estadounidenses tienden a conducir más cada año, especialmente en la era posterior a la Segunda Guerra Mundial, los números han aumentado y disminuido, generalmente en sintonía con la economía. Hasta ahora, la mayor disminución en el último medio siglo siguió al comienzo de la Gran Recesión en otoño de 2008.
Según CCC, a medida que millones de estadounidenses comenzaron a perder sus empleos, el país experimentó una disminución anual de 3.9% en millas conducidas.
Las reglas se están endureciendo en muchos lugares, y en este momento, Estados Unidos está experimentando un fuerte golpe a su economía y vida diaria. Existen órdenes de refugio en el lugar en diversos grados que cubren a los residentes de todos menos ocho estados, algo más de 300 millones de personas en total.
La semana pasada, 6.6 millones de estadounidenses solicitaron desempleo, lo que elevó a más de 16 la pérdida total de empleos en solo tres semanas, aproximadamente el 10% de la fuerza laboral total del país.
Para algunos, la situación podría ser de corta duración. La industria automotriz, por ejemplo, espera comenzar a reiniciar las fábricas norteamericanas a principios de abril. Pero es solo una utopía.
Es un tema de mucho debate qué tan rápido revivirá la economía en general, especialmente si los bloqueos prolongados obligan a muchas pequeñas empresas a cerrar permanentemente, como se teme ampliamente.
Pero no se espera que las ventas repunten durante meses, lo que significa que las plantas automotrices funcionarán más lentamente, lo que requerirán menos trabajadores.
Que logrará esta pandemia?
Hay indicios de que los ciudadanos estaban comenzando a reducir la cantidad de tiempo que están dispuestos a pasar en sus automóviles, y las millas que iban a conducir, y hay una serie de factores que acreditan esta lógica.
Los cambios que se avecinan
A medida que más y más personas se sientan cómodas trabajando desde casa, cada vez menos estarán dispuestas a trabajar en una oficina, lo que podría aliviar un poco la congestión del tráfico.
Los datos del gobierno muestran que los adolescentes de hoy esperan más tiempo para obtener una licencia, y ya no ven el proceso como un rito de iniciación.
Las costumbres de compras en línea, especialmente los gigantes minoristas como Amazon, se ha traducido en menos viajes al centro comercial, y como resultado hay menos centros comerciales de los típicos shopping mal.
Servicios como Postmates y Uber Eats están teniendo un impacto similar en la comida.
El mejorado transporte público está ganando pasajeros y los servicios para compartir viajes como Uber y Lyft, así como servicios para compartir bicicletas y scooters, le ha creado otros competidores al automóvil.
Y hay cifras en lo que respecta al trabajo, ya que el número de empleados que regularmente lo hacen desde su hogar aumentó del 4,3% en 2010 al 5,3% en 2018.
Un estudio de Gallup encontró que el 39% de los estadounidenses trabajaban de forma remota, fuera de los centros de trabajo, o al menos ocasionalmente.
Según ciertos estudios que distintas agencias han hecho, los empleados que hayan probado los beneficios de una mayor libertad y autonomía, tendrán dificultades para volver a las carreteras para llegar a sus centros de trabajo.
Hay diferentes razones y distintas opiniones, pero esta tendencia a la baja en la conducción ya era bastante evidente antes de que la pandemia dejara en casa a la mayoría de los conductores.
Según cita el departamento de transporte del estado de Arizona, los residentes del condado de Maricopa, que incluye a Phoenix, han reducido la conducción per cápita en un 7% desde 2006, y en general Arizona vio una caída del 11% en los viajes en carretera durante ese período.
Estamos en una época donde el deseo de los ecologistas está floreciendo, y la tendencia a la baja de los conductores, ya sea llegando al trabajo, a la tienda o saliendo a disfrutar la noche, esta insinuando que la historia de amor por el automóvil se ha estancado.
En los 60 los lobbies de las automotrices, presionaron para hacer un país con autopistas y centros comerciales, muy diferente del modelo europeo con un ultra eficiente servicio de transporte público.
Esto hizo que el mercado automotriz floreciera y que el automóvil pase a ser una necesidad. Los suburbios modificó la nueva vida de los Estadounidenses., que pasaron a ser dependientes del automóvil.
El año pasado se vendieron un record de 17,1 millones de vehículos nuevos y el doble de usados, por lo que el deseo de los ecologistas no floreció, pero la pandemia ha sacado lo peor por un lado, y está dejando el camino abierto para pudiéramos tener un mundo mejor, una idea que no estaba en la mente de los fabricantes de automóviles.