La posible legalización de la marihuana en dos estados de EEUU, aprobada en noviembre pasado mediante referendos, supondría una violación de las leyes internacionales, asegura el órgano de la ONU que vela por el cumplimiento de los tratados contra las drogas.
La Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) indica en su informe anual 2012 publicado hoy que «toma nota con grave preocupación» de la aprobación el pasado noviembre en Colorado y Washington de sendos referendos sobre la venta legal de cannabis.
La JIFE asegura que, de aplicarse lo votado, supondría «un desafío de consideración al objetivo de los tratados de fiscalización internacional de drogas en que los Estados Unidos son parte».
Por ello, insta al Gobierno estadounidense a que «adopte las medidas necesarias para garantizar el pleno cumplimiento de los tratados» en todo su territorio.
Legalizar cualquier narcótico, además de ir contra los tratados, «socavaría los objetivos humanitarios del sistema de fiscalización de drogas y constituiría una amenaza para la salud y el bienestar públicos», afirma el presidente de la JIFE, el belga Raymond Yans, en el preámbulo del documento.
La Convención antidrogas de 1961 limita el uso del cannabis a los campos médicos y experimentales.
A pesar del descenso de la demanda, EEUU y Canadá constituyen el mayor mercado mundial de drogas y la región que más muertes comunica por su consumo.
«Aproximadamente 1 de cada 20 muertes de personas de 15 a 64 años de edad en América del Norte está relacionada con el consumo de drogas», indica la JIFE.
El documento señala que el consumo de cocaína en la región ha bajado desde una prevalencia del 2,4 % entre la población adulta en 2006 al 1,5 % en 2011 debido al descenso del cultivo de coca en Colombia y la lucha contra el narcotráfico en México y EEUU.
Además, la JIFE destaca que el abuso de los medicamentos con receta en EEUU es «una grave amenaza para la salud pública».
Como ejemplo, cita que «el número de fallecimientos por sobredosis de opioides en el país desde 2003 fue superior a los imputables a la cocaína y la heroína combinadas».
Viena, (EFE).-
