El primer ministro Justin Trudeau afirmó que la frontera terrestre entre Canadá y Estados Unidos permanecerá cerrada a los viajes no esenciales hasta al menos el 21 de febrero.
Las restricciones han estado vigentes desde mediados de marzo del año pasado.
Se han prohibido visitas como vacaciones, viajes de un día y excursiones de compras transfronterizas en un esfuerzo por limitar la propagación del virus.
La prohibición de viajar no se aplica a quienes deben cruzar para garantizar el flujo continuo de bienes y servicios esenciales, incluidos los camioneros y el personal del hospital.
En diciembre, Trudeau aseguró que no cederá a la presión para reabrir la frontera.
Ottawa ha indicado que el cierre probablemente se extenderá siempre que los casos de COVID-19 continúen aumentando al sur de la frontera.
