La española Marian Álvarez ha recibido hoy la Concha de Plata a la mejor actriz en la 61 edición del Festival de Cine de San Sebastián por su papel en la película «La herida», de Fernando Franco.
«Dedico el premio a todas esas personas que padecen algún tipo de trastorno psicológico», ha dicho una emocionadísima Marian Álvarez, que ha recibido el galardón por su trabajo en «La herida», un durísimo filme en el que interpreta a una joven que sufre un trastorno límite de la personalidad (bordeline), aunque ella no lo sabe.
«Estoy muy orgullosa de pertenecer a la familia del cine, que podemos hacer visible lo invisible», ha añadido la intérprete, que ha recibido de manos de la cineasta y miembro del jurado oficial Valeria Bruni Tedeschi este premio por su primer trabajo protagonista en el filme del también debutante Fernando Franco.
El jurado, presidido por el director estadounidense Todd Haynes, ha reconocido la «tranquila verdad» que transmite la actriz en el filme con un trabajo «profundo, valiente, original y generoso».
«Me comprometo a seguir dando voz a los que no la tienen», ha manifestado Álvarez, ya al borde de las lágrimas, sobre el escenario del Kursaal.
Muy aplaudida a su llegada a la sala de prensa, la actriz ha recordado que el rodaje de «La herida» comenzó el pasado febrero en San Sebastián y que cuando pasaba ante el Kursaal cada día pensaba en lo bonito que sería estrenar un filme en el. «Nunca habría imaginado estar aquí».
Para la intérprete, «es de agradecer» que se premie a los actores españoles «en este momento tan difícil». «Que se reconozca que hay talento es importante», ha agregado.
Álvarez ha preferido no pronunciarse sobre el efecto «multiplicador» que podría tener para ella esta Concha de Plata.
«El panorama es desolador. Está costando sacar adelante los proyectos. Prefiero quedarme en el hoy y no pensar en mañana», ha subrayado.
San Sebastián (España), 28 sep (EFE).-