La Cumbre Iberoamericana de Panamá será «la de la renovación» ya que después de 22 ediciones hacía falta una «adaptación» a los cambios en la región, una cita en la que España presentará la mejoría de sus cifras económicas y el «buen trabajo» llevado a cabo este año desde la última reunión de Cádiz.
El secretario de Estado español de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, Jesús Gracia Aldaz, afirmó en una entrevista con Efe que en la cita de Panamá se presentará el «documento de la renovación», elaborado por el expresidente chileno Ricardo Lagos, el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, y la excanciller mexicana Patricia Espinosa.
Un informe que servirá, explicó, para dar «un impulso nuevo» a estas cumbres.
La de Panamá, que reunirá, al menos, a 14 mandatarios de América Latina, España y Portugal el 18 y 19 de octubre, será la primera a la que no acuda el rey Juan Carlos, una ausencia «por causa mayor», aunque el monarca español estará presente a través de un mensaje grabado en el que «saludará y enviará su afecto».
El heredero de la Corona española, el príncipe Felipe, sí estará en Panamá y de hecho acudirá a la inauguración el viernes de la cumbre y también a la cena de estado que el presidente panameño, Ricardo Martinelli, ofrecerá como anfitrión de la cita regional.
También participará en el encuentro empresarial previo a la cumbre y en la inauguración el día 20 del Congreso de la Lengua en representación del Rey.
España aprovechará su presencia en Panamá, en la que estará representado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, acompañado por el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, para exponer los últimos datos económicos.
Potenciar los lazos económicos con Asia también es otro de los fines de España, que por primera vez hace unos meses participó en calidad de observador en la Cumbre de la Alianza del Pacífico, de la que forman parte México, Colombia, Perú y Chile.
De hecho, en Panamá, subrayó el secretario de Estado, habrá una sesión antes de la cumbre dedicada a esa región, en la que participarán sus países miembros y el propio Rajoy.
Los cambios que experimentará la Cumbre Iberoamericana -que a partir del próximo año tras la cita de Veracruz (México) se convertirá en bienal- se deben a los avances que experimenta el mundo y América Latina en particular, explicó Gracia.
Cuando en 1991 se creó esta cumbre no había ningún foro en América Latina, España o Portugal que reuniera a jefes de Estado y de Gobierno, apuntó el secretario de Estado, quien añadió que después se multiplicaron los foros subregionales, regionales «y ahora hay un exceso de reuniones» que hay que «dosificar».
El objetivo es dar unas pautas de «cómo va a manejarse la comunidad iberoamericana en el futuro», dijo Gracia, antes de apuntar que ese cambio de la periodicidad no significa que no haya contenido suficiente que abordar o que Iberoamérica vaya a perder capacidad en el mundo.
De esta manera, la cita iberoamericana se celebrará los años pares -2014 en México- y los impares tendrá lugar la cumbre Unión Europea-América Latina.
La Cumbre Iberoamericana será así «más ágil» y los mandatarios tendrán «más tiempo para la discusión» con un «intercambio real y fluido de opiniones e intereses comunes», así como una mayor concentración de actividades de cooperación basadas en lo que une a los países latinoamericanos y a España y Portugal.
«Hay que tratar de buscar lo que nos une más, la lengua, la cultura, el espacio iberoamericano del conocimiento», agregó.
Y todo ello con el objetivo de «fortalecer» la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) para que la cumbre tenga en ese periodo de dos años «flexibilidad y agilidad para llevar a cabo todas las actividades iberoamericanas» entre una cita y otra.
Buscando -continuó el secretario de Estado- un procedimiento de concertación entre las organizaciones iberoamericanas de tal manera que «no haya repeticiones, un exceso de gasto de burocracia» y que se vaya a lo que interesa a los ciudadanos.
«La comunidad iberoamericana es una realidad, algo que existe antes de la cumbre y que existirá después de la cumbre», añadió Jesús Gracia.
Y apostilló: «En todos los ámbitos del conocimiento hay un interés por buscar lo iberoamericano, que va más allá de lo latinoamericano o lo europeo».
Madrid, 14 oct (EFE).-