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La coalición gobernante de México obtiene el 73% de los escaños en el Congreso tras ganar solo el 60% de los votos

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La coalición gobernante de México obtiene el 73% de los escaños en el Congreso tras ganar solo el 60% de los votos
La coalición gobernante de México obtiene el 73% de los escaños en el Congreso tras ganar solo el 60% de los votos

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El instituto electoral de México votó el viernes para dar al gobernante partido Morena y sus aliados alrededor del 73% de los escaños en la cámara baja del Congreso, aunque la coalición ganó menos del 60% de los votos en las elecciones del 2 de junio .

El fallo, que puede ser impugnado en los tribunales, daría a la coalición gobernante la mayoría de dos tercios que necesita la Cámara de Diputados para aprobar cambios a la Constitución mexicana . Si el fallo se mantiene, Morena y sus aliados tendrían alrededor de 364 escaños en el cuerpo de 500 bancas.

Los críticos dijeron que eso le daría a Morena más poder en el Congreso del que obtuvo en las urnas.

La disputa se refiere a una ley que asigna algunos escaños en el Congreso sobre la base de la representación proporcional. Esa ley fue diseñada para dar a los partidos más pequeños algunos escaños en el Congreso, en función de su porcentaje de votación a nivel nacional, incluso si no podían ganar las elecciones individuales por distritos del Congreso.

Pero la ley también estipula que los escaños proporcionales no pueden utilizarse para darle a ningún partido la mayoría en el Congreso.

Morena aparentemente resolvió ese problema “prestando” algunos de sus candidatos ganadores en distritos del Congreso a dos partidos aliados más pequeños. Los partidos más pequeños no están sujetos a la regla de no mayoría, pero votan en sintonía con Morena.

El consejo directivo del instituto votó que las reglas de representación proporcional se aplican sólo a los partidos individualmente y sin tomar en cuenta el efecto que podrían tener sobre una coalición mayoritaria.

Aunque Morena y sus aliados no lograron una mayoría de dos tercios en el Senado, cuya aprobación también es necesaria para los cambios constitucionales, la coalición se quedó corta sólo por dos o tres escaños en ese órgano y podría ganar los votos necesarios de un partido más pequeño.

El presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, y su sucesora, la también miembro de Morena Claudia Sheinbaum, han prometido utilizar la mayoría de dos tercios para impulsar 20 cambios constitucionales , incluyendo hacer que todos los jueces sean candidatos a las elecciones.

Los críticos dicen que elegir jueces socavaría la independencia del poder judicial en favor de un control aún mayor del partido gobernante

La propuesta ha generado críticas por parte de inversionistas e instituciones financieras y del embajador de Estados Unidos en México en los últimos días.

El martes, Morgan Stanley rebajó su recomendación para invertir en México, diciendo que los cambios “aumentarían el riesgo”. En un informe de análisis, Citibanamex advirtió que la aprobación de la propuesta podría terminar en la “cancelación de la democracia liberal”.

El jueves, el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, dijo que los cambios propuestos representan un riesgo para la democracia de México y que amenazan “la relación comercial histórica” entre los dos países.

Además, los tribunales federales han estado prácticamente cerrados debido a una huelga de empleados judiciales que comenzó el lunes en protesta contra la propuesta judicial. Jueces y magistrados se unieron a la huelga el miércoles.

Entre otras propuestas constitucionales, Morena está impulsando un cambio que en esencia eliminaría todos los órganos independientes de supervisión y regulación del país. El partido dice que son un desperdicio de dinero y que las responsabilidades de supervisión deberían ser otorgadas a los departamentos gubernamentales, permitiéndoles básicamente que se vigilen a sí mismos.

López Obrador ha intentado sacar adelante sus proyectos de infraestructura favoritos —principalmente ferrocarriles y refinerías de petróleo— sin supervisión, regulación ni declaraciones de impacto ambiental, pero con frecuencia se ha topado con impugnaciones judiciales. Cambiar la Constitución eliminaría esos obstáculos.

López Obrador dejará el cargo el 30 de septiembre, pero Sheinbaum, que ganó las elecciones del 2 de junio para convertirse en la primera mujer presidenta de México , ha prometido continuar con todas sus políticas.

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