Lima, 31 ene (EFE).- La candidata presidencial Keiko Fujimori, favorita a los comicios del próximo 10 de abril en Perú, rechazó hoy que su padre, el expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), haya cometido delitos durante su gestión, aunque consideró que tuvo «gran responsabilidad política» al permitir que estos hechos sucedieran.
«A muchos funcionarios honestos nos pusieron en un mismo saco por ciertas personas que cometieron delitos y que purgaron cárcel por ello», declaró Keiko, quien fuera primera dama de Perú desde 1994, en una entrevista publicada hoy por el diario El Comercio.
La candidata, que encabeza los actuales sondeos de opinión con un 33 % de preferencias, aseguró que la condena a 25 años de cárcel que se dictó en 2009 contra su padre por delitos de lesa humanidad «fue preparada muchos meses antes de que él fuera condenado y mientras él estaba en el extranjero.»
«Nosotros creemos en la inocencia de Alberto Fujimori, pero a la vez señalamos que él tuvo una gran responsabilidad política como presidente, al haber permitido que estos hechos de corrupción sucedieran», agregó.
Keiko detalló que su padre, que ha sido sentenciado en cinco procesos, «cometió el grave error político de mantener a (su asesor) Vladimiro Montesinos hasta el final de su gobierno».
También consideró «un grave error» que su padre le entregara 15 millones de dólares de fondos estatales a Montesinos en el año 2000 como Compensación por Tiempo de Servicios (CTS), una decisión que llevó a una sentencia de siete años y seis meses de cárcel por delitos de peculado doloso por apropiación (malversación de fondo públicos) y falsedad ideológica en agravio del Estado.
Aseguró que su padre no tuvo «responsabilidad en ese aspecto» y que las sentencias por delitos de corrupción se dieron porque él decidió «ya no ejercer su defensa en los siguientes procesos.»
«Ya no había confianza en ese tribunal. Por eso él se allana (acepta su responsabilidad)», señaló antes de matizar que cuando se le juzgo por la compra de la línea editorial de medios de comunicación populares, conocidos como diarios «chicha», su padre «ahí nuevamente retomó su defensa.»
Keiko también consideró «bastante subjetiva» una pregunta sobre si ella hubiera dado el autogolpe de Estado de 1992, aunque dijo que «de ninguna manera hubiera cerrado el Congreso», tal como hizo su padre en abril de ese año.
La candidata también rechazó las denuncias que hizo su madre en 1992 y en el 2000 de que fue torturada con electricidad por orden de su padre, un extremo que, según dijo, «no sucedió.»
«Lo que le puedo decir es que esta denuncia ha sido desestimada por instancias internacionales que no tienen carga política. Yo siempre he tenido una excelente relación con mi madre y con mi padre», acotó.
Keiko aseguró que no va «a juzgar ni a hablar públicamente de la relación tan difícil y compleja» que tuvieron sus padres y afirmó que «felizmente hoy están divorciados y mantienen una relación de respeto entre ambos.»
La candidata también rechazó que personajes de su entorno, como su candidato a primer vicepresidente José Chlimper, hayan tenido vínculos con Montesinos y anunció que evaluará las denuncias sobre actos de corrupción cometidos por candidatos al Congreso.
«Sobre todo en casos de corrupción vamos a retirarlos. Pero primero tenemos que encontrar el procedimiento y lo haremos respetando nuestro reglamento interno», indicó.
Keiko afirmó que su partido, Fuerza Popular, defiende «las libertades individuales sociales y políticas», cree «en la competencia para lograr los objetivos y los sueños de cada persona» y considera «fundamental igualar la cancha (emparejar las cosas)» para que «el Estado entregue a las personas igualdad de oportunidades en servicios de salud, de educación e infraestructura.»