Google de Alphabet violó la ley con un comportamiento monopolístico en las búsquedas en línea y la publicidad relacionada, dictaminó el lunes un juez federal, la primera victoria para las autoridades antimonopolio de Estados Unidos que han presentado numerosas demandas desafiando el dominio del mercado de las grandes tecnológicas.
La decisión es una victoria significativa para el Departamento de Justicia de Estados Unidos, que había demandado al gigante de los motores de búsqueda por su control de aproximadamente el 90 por ciento del mercado de búsquedas en línea y el 95 por ciento en teléfonos inteligentes.
«El tribunal llega a la siguiente conclusión: Google es un monopolista y ha actuado como tal para mantener su monopolio», escribió el juez de distrito estadounidense Amit Mehta.
Su fallo contra Google allana el camino para un segundo juicio para determinar posibles soluciones, como dividir la empresa o exigirle que deje de pagar a los fabricantes de teléfonos inteligentes miles de millones de dólares anuales para configurar Google como el motor de búsqueda predeterminado en los teléfonos nuevos.
En última instancia, Google tendrá la oportunidad de apelar las decisiones del tribunal ante el Tribunal de Apelaciones del Distrito de Columbia de Estados Unidos.
Las acciones de Alphabet, la empresa matriz de Google, cayeron un 4,3 por ciento el lunes como parte de una caída generalizada de las acciones tecnológicas.
Google pagó miles de millones para ser el navegador predeterminado
Mehta señaló que Google había pagado 26.300 millones de dólares estadounidenses solo en 2021 para garantizar que su motor de búsqueda fuera el predeterminado en los teléfonos inteligentes y navegadores, y para mantener su participación dominante en el mercado.
«El valor predeterminado es un bien inmueble extremadamente valioso», escribió Mehta. «Incluso si un nuevo competidor estuviera en condiciones, desde el punto de vista de la calidad, de pujar por el valor predeterminado cuando expire un acuerdo, esa empresa sólo podría competir si estuviera dispuesta a pagar a sus socios más de miles de millones de dólares en cuotas de ingresos y compensarlos por cualquier déficit de ingresos que se produzca como consecuencia del cambio».
Añadió: «Google, por supuesto, reconoce que la eliminación de los valores predeterminados afectaría drásticamente a sus resultados. Por ejemplo, Google ha previsto que la eliminación de los valores predeterminados de Safari daría lugar a una importante caída de las consultas y a una pérdida de miles de millones de dólares en ingresos».
El fallo es la primera decisión importante en una serie de casos que abordan supuestos monopolios en las grandes empresas tecnológicas.
«Una desinversión forzosa del negocio de búsquedas privaría a Alphabet de su mayor fuente de ingresos. Pero incluso perder su capacidad para alcanzar acuerdos exclusivos por defecto podría ser perjudicial para Google», dijo la analista senior de Emarketer, Evelyn Mitchell-Wolf. Señaló que un proceso legal prolongado retrasará cualquier efecto inmediato para los consumidores.
En los últimos cuatro años, los reguladores antimonopolio federales también han demandado a Meta Platforms, Amazon.com y Apple Inc., alegando que las empresas han mantenido monopolios ilegales. Está previsto que en septiembre se celebre otro juicio contra Google por su tecnología publicitaria.
Cuando se presentó el caso de búsqueda de Google en 2020, fue la primera vez en una generación que el gobierno estadounidense acusó a una gran corporación de monopolio ilegal. Microsoft llegó a un acuerdo con el Departamento de Justicia en 2004 por acusaciones de que había obligado a los usuarios de Windows a usar su navegador web Internet Explorer.
