Por José Quintana los Medias Blancas de Chicago buscaban fortalecer sus bases. Querían cambiar al lanzador y obtener jugadores jóvenes a cambio. Parecía una utopía debido al inicio de temporada que estaba teniendo el colombiano. Pero la organziación nunca desistió, la apuesta no era regalarlo a cualquier precio. Sobre todo por la temporada de ensueño que registró el colombiano en 2016. Así que esperaron el momento y la oferta adecuada. No fueron muchos los equipos que sonaron para quedarse con el zurdo de Arjona, pero sí se involucraron dos de renombre como: los Astros de Houston y los Yanquis de Nueva York. Pero fueron los Cachorros de Chicago, que en silencio, dieron el paso definitivo por Quintana.
El último campeón de las Grandes Ligas dio a cambio a sus mejores dos prospectos por el colombiano: el jardinero Eloy Jiménez y el lanzador Dylan Cease. No se guardaron nada. El gerente general, Theo Epstein, tiene claro que si su equipo quiere regresar a postemporada y competir por el título de la Serie Mundial, es necesario fortalecer el staff de lanzadores abridores. Debido a que los dos aces con los que cuenta, Jake Arrieta y Jon Lester, no están teniendo la mejor temporada. Los dos lanzadores tienen efectividad por encima de 4.00.
Será un cambio que puede traer cosas positivas para José Quintana debido a que pasa de la Liga Americana a la Liga Nacional, en la que el lanzador tiene la posibilidad de batear (contrario a la Liga Americana que cuenta con un bateador designado). Además, llega a un equipo que lo puede apoyar ofensivamente de mejor manera. Los Cubs cuentan con bates como los de Ian Happ, Anthony Rizzo, Kris Bryant o Wilson Contreras, quienes pueden evitar esa constante falta de decisión del lanzador.
Además, llega a manos de uno de los mejores managers que tiene las Grandes Ligas, que es Joe Maddon. El entrenador puede potenciar al colombiano de 28 años. Quintana en sus seis años como lanzador de los Medias Blancas de Chicago registró un record de 50 victorias y 54 derrotas, con una efectividad de 3.51 en 172 partidos de los que 169 de ellos fue como abridor. Con la novena de Chicago terminó con un total de 68 encuentros sin decisión, la marca más alta en este lapso en las mayores.
El zurdo nacido en Arjona llega a reforzar a un staff de lanzadores que es el quinto mejor en efectividad en la Liga Nacional (4.10), pero sus abridores no están contando con una buena campaña. Todos registran una efectividad de 4.66 en 88 encuentros. Por su parte, Quintana en 2017 tiene registro de cuatro victorias y ocho derrotas con una efectividad de 4.49. Sin embargo, en sus últimas cinco salidas ha ganado dos partidos, no ha perdido ninguno y tiene efectividad de 2.43.
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