Después de un largo, intenso y desgastador juicio entre dos figuras públicas reconocidas por sus trabajos en la gran pantalla, llegó a su fin un debate judicial que mantuvo ocupada a la opinión pública durante meses.
El tribunal estadounidense, integrado por siete jurados, que llevó el caso entre Johnny Depp y Amber Heard, decidió que la actriz de la película Aquaman, actuó con malas intenciones cuando se declaró víctima de violencia doméstica en una información que ofreció al periodico The Washington Post en 2018.
Por tal razón, deberá pagarle a Depp la suma de 15 millones de dólares por indemnización mientras éste deberá reembolsar 2 millones por difamación mutua.
En reiteradas ocasiones, la actriz aseguraba que además de maltrato domestico, hubo “violencia sexual”, afirmaciones que trascendió a las palabras escritas con el fin de difamar al actor.
Aunque lo curioso del caso es que aunque haya ganado el juicio el protagonista de “Piratas del Caribe”, por lo complejo y reconocido que es el sistema estadounidense de protección a favor de la mujer, en esta ocasión el jurado estuvo del lado de un hombre, cuando determinó que hubo ensañamiento por parte de Heard, en las tres ocasiones que afirmó haber sido maltratada.
La actriz, que se mostró visiblemente decepcionada por el veredicto del jurado, dijo que “más allá de las palabras” el dictamen es un “revés” para las mujeres y sus derechos.