Miles de personas asistieron a una protesta contra el racismo en el centro de Montreal este domingo por la tarde, expresando su enojo por las propuestas del gobierno de la Coalición Avenir Quebec que, afectarían a los inmigrantes y las minorías religiosas de la provincia.
Muchos ven los planes como racistas y xenófobos.
«Estamos preocupados por la elección de CAQ porque han estado tratando de dividir a los quebequenses en verdaderos quebequenses e inmigrantes», dijo Scott Weinstein, de The Independent Jewish Voices, uno de varios grupos en la manifestación.
Después de una victoria histórica en la elección provincial de la semana pasada, el líder del partido, Francois Legault, reiteró los planes para reducir la inmigración en un 20 por ciento. También quiere imponer una prueba de valores y de lengua francesa para inmigrantes, la cual, si no es aprobada, dejaría abierta la posibilidad de deportación para los inmigrantes.
Kheira Megdoud, una mujer musulmana en la protesta que lleva un hijab, afirmo, » Legault, fue elegido y por algunos quebequenses ultraconservadores que están hartos de la inmigración «.
Una de las principales prioridades del partido es una carta de laicismo que Prohibiría a los funcionarios públicos en puestos de autoridad usar elementos religiosos visibles, como pañuelos en la cabeza. Las profesiones afectadas incluirían oficiales de policía, maestros y jueces.
«Dejamos nuestro país hace muchos años para construir y ser parte de este país no para que nos vulneren nuestros derechos», grito Megdoud.
En respuesta a las críticas de que tal plan se opondría a la Carta de Derechos y Libertades, Legault prometió invocar la cláusula anterior.
«Vamos a combatirlo», dijo Marlihan López, una de las manifestantes. «Vamos a luchar hasta el final».
Estas propuestas, del nuevo gobierno “racista” de Quebec, sin lugar a duda establecen un tono excluyente y xenofóbico que crea división y alienta a los grupos racistas a atacar a las minorías. El martes, un tweet de la líder de extrema derecha de Francia, Marine Le Pen, apoyando al partido en sus propuestas, obligó a Legault a rechazar cualquier asociación con ella.
El problema con la respuesta del nuevo racista premier de Quebec, es que dice que rechaza el comentario de Le Pen, pero que nada ha cambiado en términos de sus políticas.
Los manifestantes prometen hacer todo lo posible para evitar que Legault implemente sus planes y esto, dicen, es solo el comienzo.
«Estar en la calle es solo una tarde de solidaridad, el trabajo real viene en nuestros lugares de trabajo y en nuestras comunidades» afirmaron los líderes de la protesta.